River aplastó a Patronato

Tras la derrota con Unión, River volvía al Monumental para jugar el primer partido oficial del año ante su gente y tratar de sumar sus primeros tres puntos en la Copa de la Liga. Y de la mano de Julián Álvarez, lo consiguió con un contundente 4-1 sobre Patronato.

La historia no empezó fácil para los dirigidos por Marcelo Gallardo, que a los 5 minutos se vieron en desventaja después de un flojo retroceso que le permitió a Gabriel Gudiño ejecutar un centro desde la izquierda, con la fortuna de que se desvió en Paulo Díaz y se le metió por encima a Franco Armani.

Entonces, los dueños de casa reaccionaron y trataron de controlar las acciones en el mediocampo, en busca de los espacios para llegar a fondo por las bandas. Sin Juan Fernando Quintero ni Nicolás De La Cruz, Enzo Fernández volvió a vestirse de enganche y le dio verticalidad y volumen de juego al equipo en la adversidad.

Después de un aviso previo con un cabezazo de Esequiel Barco de pique al suelo, fue Julián Álvarez el encargado de anotar el tanto del empate. Un notable cambio de frente de David Martínez y una asistencia de Andrés Herrera le dieron la chance al Araña de controlar y cabecear a un metro del arco para vencer la resistencia de Matías Mansilla.

Envalentonado por su primer festejo en el certamen, el goleador volvió a gritar unos minutos más tarde. Fernández condujo un avance con criterio, le filtró una pelota a espaldas de la última línea entrerriana y el flamante refuerzo del Manchester City sacó un potente disparo que dejó sin reacción del arquero visitante.

El resultado se ajustó entonces un poco más a lo que se había visto en el campo de juego, con un Millonario que, sin brillar, había asumido el protagonismo y demostrado superioridad sobre su rival.

En el inicio del complemento, Gudiño volvió a ser protagonista y casi aprovecha una salida en falso de Enzo Pérez para volver a marcar, aunque esta vez se encontró con un sólido Franco Armani que despejó su fuerte remate al córner.

En la réplica, Tomás Pochettino volvió a dejar a Álvarez cara a cara con Mansilla y el 9 cruzó un tiro inatajable para liquidar el trámite y ganarse una nueva ovación de los riverplatenses.

Los del Muñeco se dedicaron a manejar los tiempos con la pelota lejos de su arco y, de contra, terminaron de aniquilar las esperanzas rojinegras. Al ingresado Juan Fernando Quintero le cometieron penal después de una gran corrida por izquierda de Enzo Fernández y el propio colombiano se hizo cargo desde los 11 metros y anotó el cuarto.

Como había ocurrido en el duelo disputado en noviembre pasado, el Patrón no fue un obstáculo para un River que levantó su nivel y lo superó sin mayores dificultades. El domingo, intentará ratificarlo contra Newell’s en Rosario.