CORONAVIRUS EN ARGENTINA

El crudo testimonio de Víctor Hugo Morales en su internación por coronavirus

El periodista habló en su programa de radio después de salir de terapia intensiva. "Estoy devastado, lo que ha sucedido con mi cuerpo, con mi energía es durísimo", dijo.

El crudo testimonio de Víctor Hugo Morales en su internación por coronavirus

Hace un mes Víctor Hugo Morales daba positivo de coronavirus después de tener algunos síntomas. Días más tarde el famoso y querido periodista debió ser internado en el Sanatorio los Arcos por una neumonía bilateral provocada por el COVID-19.

Luego de permanecer casi un mes en terapia intensiva, el relator de El Gol del Siglo pasó a una sala común. Horas antes habló en su programa de radio, La Mañana, por AM 750 y dio detalles de lo que le tocó vivir.

"Buen día, amigos. Finalmente aquí estamos. Un abrazo muy agrande y una inmensa gratitud por toda la compañía de este tiempo. Nos ponemos en marcha poco a poco", comenzó diciendo el periodista de 73 años y continuó: "Estamos poco a poco reuniéndonos después de esta etapa de COVID-19. En lo que a mí respecta, estoy pasando en esta jornada, en unas horas de la sala de terapia intensiva a una sala general. Me parece mentira salir de aquí. Y eso podría ser el primer paso hacia una recuperación más plena de todo lo que se ha padecido en función del COVID-19″.

Después de su editorial en la que se refirió a todo lo sucedido entre el Gobierno nacional y Horacio Rodríguez Larreta, Víctor Hugo respondió algunas preguntas de sus oyentes sobre su salud. "¿Cuándo, en qué momento, sentiste miedo?", consultó una mujer. La respuesta del uruguayo fue que mientras iba a hacerse una tomografía computada sintió miedo y agregó: "Nunca tuve plenísima consciencia de lo mal que estaba. Lo sabía mi familia, los médicos. Yo no supe tanto de mí hasta que hubo una situación un poquito más controlada. Nunca totalmente controlada. Si he estado un mes en terapia intensiva, imaginate que los avatares han sido muchísimos".

Con mucha franqueza, Morales relató: "Estoy devastado. Lo que ha sucedido con mi cuerpo, con mi energía espiritual y mental es durísimo. Para nosotros, los relatores, es un tema -sostuvo- Desde el primer momento en que sentís que algo raro te está pasando con la voz empezás a temer. Ha sido una de mis desesperaciones más cotidianas: tratar de impostar la voz. Y no te sale, no alcanzás a hacerlo. Y entonces sí te vas poniendo nervioso y preocupado. Pero, supongo, que es parte del deterioro".