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LIGA PROFESIONAL

Una temporada de despedidas en Argentina

Licha, Maxi, Scocco, Ricky Álvarez y Ponzio dicen adiós a sus clubes en este 2021. Los cuatro últimos despidiéndose del fútbol, mientras que el futuro de Lisandro es una incógnita.

Una temporada de despedidas en Argentina

El fútbol argentino está poniendo el broche final a la temporada con las despedidas de algunos ídolos dentro de los clubes. El último, que tuvo su merecido reconocimiento sobre el terreno de juego, fue Lisandro López con Racing. Con la Copa Sudamericana en juego para su equipo, el minuto 15 tomó protagonismo en El Cilindro para que la leyenda de La Academia pusiera fin a su etapa dentro del club. Uno más que se una a una temporada que deja grandes despedidas como la de Maxi Rodríguez, Ignacio Scocco, Leonardo Ponzio o Ricky Álvarez.

Maxi Rodríguez es el mayor de estos tres nombres que de alguna manera se han convertido en leyendas dentro del fútbol argentino. Con tres etapas en Newell's, a sus 40 años deja el fútbol profesional, dejando un sabor amargo y pena dentro de la Lepra. De 1999 a 2002, de 2012 a 2017 y de 2019 a 2021, cierra una carrera por todo lo alto que también le hizo brillar en Europa y con Argentina. 284 en el club argentino a lo largo de su carrera, con 94 goles que agrandan aún más su figura dentro de Newell's.

Ignacio Scocco ha acompañado los pasos de Maxi, y a sus 36 años también se ha despedido del fútbol y de Newell's, el club que le impulso a lo que se convirtió posteriormente. Su carrera, llena de momentos en los que consiguió destacar, le llevaron a jugar durante tres etapas en la Lepra. La primera, de 2003 a 2006, le dio la posibilidad de probar suerte en clubes del extranjero hasta 2014, cuando volvió al fútbol argentino para estar en Newell's hasta 2017. Solamente la llamada de River interrumpió la carrera de Scocco en el club, pero en 2020 volvió para cerrar hasta 2021 una etapa que había quedado abierta. Tras él, 214 partidos disputados y un total de 78 goles a sus espaldas.

Ricky Álvarez es el más joven de los tres. Por edad, el fútbol podría depararle aún grandes cosas. No obstante, con 33 años las lesiones han ido haciendo mella en una carrera que finalizó donde tuvo sus inicios: Vélez. Con El Fortín el talentoso zurdo tocó la gloria, lucho por levantarlo, y se hizo un nombre cuando volvió de Europa. Dos etapas que le vieron nacer y le han visto acabar su carrera. De 2007 a 2011, y de 2019 a 2021. Un total de 84 partidos a los que acompañaros 10 goles y 11 asistencias, estando siempre al servicio de lo que necesitó su equipo.

Leonardo Ponzio es otro de los futbolistas que ha decidido poner fin a su carrera. Su última temporada en River ha llevado consigo un título de Liga Profesional que también coronó a Marcelo Gallardo. Un coloso dentro del fútbol argentino que pasó en el Millonario gran parte de su carrera a través de dos etapas. De 2006 a 2008, y de 2012 a 2021. Una entidad dentro del club que deja tras de si un total de 357 partidos. Palabras mayores para un centrocampista que vivió cada partido como si fuera el último, y se lleva consigo el reconocimiento de la gente que le ha acompañado en todo este camino.

Lisandro López ha sido el quinto histórico que ha dicho adiós a su club. El futuro de Licha es una incógnita. Con futuro en Junín por asuntos familiares, la especulación es que podría acabar en las filas de Sarmiento. No obstante, el sabor a despedida que deja en Racing es difícil de describir. Y su pérdida para el club, un hueco que tardarán en rellenar. Tres etapas dentro de La Academia, la inicial de 2003 a 2005 antes de marcharse a Europa, posteriormente de 2016 a 2021 antes de probar la MLS. Y en la situación complicada del club, volvió para ayudar y despedirse. 227 partidos repartidos entre muchos de sus años, con 79 goles y 25 asistencias. Con 38 años ha dicho adiós al club de su vida. Eso sí, con una ovación acorde a su magnitud.

El fútbol argentino va cerrando su temporada con alegría por lo que ha supuesto una nueva normalidad dentro del campeonato, con la vuelta de los hinchas a las canchas, pero también con alguna lágrima bajo los ojos por aquellos que dejan los clubes que les vieron brillar.