BOCA-RIVER
Boca - River: así fue el camino de River hacia la Superfinal
Las ganas de revancha tras caer el año pasado en semifinales no fueron más que otro aliciente para un plantel muy completo y bien dirigido por Marcelo Gallardo.
Desde que arrancó la competición, River era uno de los candidatos más importantes para estar en la final. Las ganas de revancha tras caer el año pasado en semifinales no son más que otro aliciente para un plantel muy completo y magníficamente dirigido por Marcelo Gallardo. Su camino en esta edición ha mezclado grandes actuaciones con ciertas dudas, pero siempre compitiendo.
Una fase de grupos de Libertadores sin derrotas
Dos empates en las dos primeras jornadas hicieron temblar a la hinchada. River venía de varios meses de mal juego y el equipo no atravesaba un buen momento. Sin embargo, tras la Supercopa que gana ante Boca, el equipo cambia el chip y empieza a ganar partidos. Derrota a Emelec de local y de visitantes, encarrilando la clasificación. Los tres puntos conseguidos ante Independiente de Santa Fe en Colombia cerraron el pase y con un empate ante Flamengo en la última jornada cerró como primero una notable fase de grupos.
El Monumental, clave para llegar a semifinales
En octavos iba a tener el primer duelo del torneo contra un equipo argentino. Fue ante un gran Racing, que llegaba como uno de los mejores equipos de la primera fase. La calidad de futbolistas como Cardozo o Centurión amenazaban a River. El 0-0 en El Cilindro dejó abierta la eliminatoria, que se definiría en El Monumental. Fue en casa donde el Millonario mostró su potencial reventando el duelo en apenas media hora.
Un guión similar tuvo el cruce de cuartos de final ante Independiente. El Rojo, al igual que River, era un equipo experto en eliminatorias y con futbolistas de mucha calidad capaces de decidir cualquier partido. La ida en Avellaneda acabó con empate sin goles. En la vuelta, la igualdad también fue notable. River abrió el marcador pasado el descanso y Independiente empató pronto, complicando al equipo de Gallardo. Sin embargo, apareció la pareja colombiana del millonario (Quintero - Borré) para sentenciar la eliminatoria.
Victoria heroica de River en Porto Alegre
Gremio, vigente campeón y uno de los equipos más potentes de Sudamérica era el último escollo a la final. La ida fue en El Monumental, y el objetivo de Gallardo era viajar a Porto Alegre con un resultado positivo y, lo más importante, sin goles en contra. Sin embargo, un cabezazo de Michel silenciaba las gradas y trastocaba los planes del técnico, que fue con todo en contra al Arena Do Gremio.
Con poco que perder, River llegó a Brasil sabiendo que un gol volvía a meterlos en la eliminatoria. Por si no era suficientemente complicado, Gomes aumentó la ventaja de los brasileños con un gol en la primera mitad. Faltaban 10 minutos y el acoso al arco de Marcelo Grohe era constante. Santos Borré acercaba el sueño con el empate en el 82'. Poco después, la jugada de la discordia: Bressan despejaba un disparo con la mano y, tras consultar el VAR, el uruguayo Cunha pitaba penalti para River. Tras varios minutos de protestas, 'Pity' Martínez tomó la responsabilidad y anotó la pena máxima. El gol que le dio el pase a la final tras un remontada de infarto.
Por si fuera poco, la clasificación tardó en confirmarse varios días. Gremio protestó ante la Conmebol las infracciones que cometió Marcelo Gallardo en el partido de vuelta. A pesar de estar sancionado, el técnico se comunicó con su cuerpo técnico y quiso bajar al vestuario en el descanso. El tricolor pidió la eliminación del conjunto millonario, pero el recurso no prosperó y River se convirtió en finalista.
