El 1x1 de River: el empuje de De La Cruz y la presencia de Borja

Franco Armani

Hoy no tuvo intervenciones para salvar su arco, pero tampoco fue responsable en los goles que recibió.

Andrés Herrera

Metió el centro para el gol de Barco y se mostró bastante incisivo por su banda. Le costó en algunas ocasiones terminar bien las jugadas.

Emanuel Mammana

Seguro con la pelota en sus pies y firme en el mano a mano, pero algo descoordinado con su compañero de zaga en el retroceso.

Paulo Díaz

También duro de pasar en el uno contra uno y sin fisuras en la salida. Por momentos otorgó ciertas concesiones en las coberturas.

Elías Gómez

Liviano cuando pasó al ataque y frágil en su función defensiva. Falló en el cálculo en la jugada del segundo gol visitante.

Santiago Simón

No tuvo un buen regreso a la titularidad. Falló algunos pases, le costó romper líneas por sorpresa y asociarse con sus compañeros cerca del área.

Bruno Zuculini

En general correcto en los anticipos y los pases cortos. Cuando trasladó la pelota, se equivocó en algunas decisiones y ejecuciones.

Agustín Palavecino

No estuvo fino. Intentó y pidió la pelota siempre que pudo, pero fue más voluntad que claridad.

Nicolás De La Cruz

Puso el corazón cuando no le salieron las cosas desde lo futbolístico. Intentó ser siempre opción de pase y conducir los ataque riverplatenses, sin mostrar un gran desempeño.

Pablo Solari

Encarador como siempre, pero sin tanta profundidad y bien contenido por la defensa visitante. Salió en el segundo tiempo.

Lucas Beltrán

Dedicado y luchador, con escasa presencia en el área.

Miguel Borja

Tuvo menos compromiso con el juego que Beltrán, pero fue referencia en ataque, preocupó a los centrales banfileños y convirtió de cabeza.

Tomás Pochettino

Volvió a tener una oportunidad después de mucho tiempo, pero se notó su falta de rodaje y confianza.

Matías Suárez

En el tiempo que tuvo en cancha no pesó demasiado. Apenas tuvo una chance al final y la desaprovechó.

Esequiel Barco

Tuvo un par de intervenciones positivas, pero sin la incidencia necesaria para torcer el rumbo del partido.