QATAR 2022 | POLONIA 0-2 ARGENTINA
Argentina recupera el mando
La selección de Scaloni por fin fue capaz de dominar un partido por completo en Qatar y sumó los tres puntos que lo colocan en una situación privilegiada.
Argentina tenía una nueva final y volvió a cumplir, como hizo en la segunda fecha ante México. Esta vez tuvo enfrente a una selección de Polonia decidida a defender de principio a fin pero solo Szczęsny fue una figura que incomodó a la albiceleste gracias a sus geniales intervenciones, incluido el penal que repelió a Messi. Los de Scaloni tomaron la pelota y no cesaron en sus intentos hasta lograr una renta de dos goles. Sumaron pases en campo rival y los centrocampistas crecieron en confianza y despliegue.
La albiceleste dejó unos registros fantásticos en el cierre de la fase de grupos. Ahora llegará el turno de medirse a Australia en octavos de final y para ese partido el equipo llega con la confianza de ganar dos partidos donde no se podía fallar y la mejoría clara en el juego. Ante Polonia completaron 800 pases de 868 intentos y ahí los centrocampistas fueron clave en el movimiento de balón. De Paul, criticado tras los dos primeros partidos, completó 137 pases, récord para un jugador argentino en un Mundial desde al menos según 1966, según datos de Opta.
Enzo Fernández, que volvió a ser clave con su asistencia en el gol de Julián Álvarez, también fue claro protagonista con la pelota. Dio 86 pases y ganó los cinco duelos que encaró en el partido. Fue la gran novedad en el once inicial y cumplió una vez más con todas la expectativas generales. Cuesta pensar que Scaloni lo devolverá al banco de suplentes en el resto de campeonato. También Mac Allister cumplió con creces. Marcó el primero del duelo y completó un 96% de pases acertados. Además, fue el líder en recuperaciones con 14.
Pases con sentido
Acumular 800 pases no garantiza nada en el fútbol pero en este caso Argentina sí que los supo rentabilizar a pesar de medirse a un rival experto en la tarea defensiva y que se dedicó a cerrar su área en todo momento. Los de Scaloni sumaron un total de 23 disparos por apenas cuatro de Polonia. 12 de ellos fueron entre palos y obligaron a Szczęsny a realizar ocho paradas a remates desde dentro del área.
Un buen ejemplo que da luz a todos esos datos es el segundo gol del partido. Se trata de una jugada en la que Argentina realiza 27 pases. Es la cifra más alta para la selección en un gol dentro de una cita mundialista. Supera a un gol recordado por cada aficionado de la albiceleste, el anotado por Cambiasso en 2006.
Además, todo el dominio de la posesión, buena parte del tiempo en campo rival, sirvió para que el ‘Dibu’ Martínez apenas tuviese trabajo y de esa forma cerrarse de nuevo su arco. Tras el varapalo del estreno Argentina ha sido capaz de mantener en los dos siguientes partidos la meta imbatida. Un aspecto básico para la confianza del equipo de cara a los cruces.