Estudiantes y River construyeron un buen empate en La Plata
El puntero tuvo un partido complicado contra el Pincha y, aunque empezó ganando, Armani fue una de las figuras para sostener el 1-1 definitivo.
Luego de varias fechas en las que los resultados de sus perseguidores lo favorecieron, a River le tocaba enfrentar a Estudiantes con la certeza de que Talleres ya había vencido a Huracán, de manera que el líder debía ganar si quería mantener la ventaja de 9 puntos.
El plan de ambos equipos quedó plasmado desde el comienzo. Mientras el Pincha trataba de presionar la salida del rival y jugar rápido y directo cuando recuperaba, los dirigidos por Marcelo Gallardo administraban la pelota y la hacían circular, aunque les costaba encontrar profundidad ante la férrea línea de cinco hombres del local.
En el primer tramo, el dominador fue el conjunto dueño de casa, que con buenos aportes de Fernando Zuqui y un peligroso Gustavo Del Prete recostado sobre la izquierda exigió a Franco Armani en un par de oportunidades. La más clara la tuvo Leonardo Godoy, pero el arquero riverplatense le tapó con los pies lo que hubiera sido la apertura del marcador.
De a poco, el Millonario se fue adaptando a las dificultades que proponían los platenses y a probar con remates de afuera o envíos cruzados para complicar a un hasta allí seguro Mariano Andújar.
El trámite parecía encaminarse al descanso con el resultado cerrado, sin embargo fue River el que le sacó jugo a una pelota parada cuando Agustín Palavecino envió un córner cerrado al área chica y Robert Rojas apareció por sorpresa y sin marca para decretar, de cabeza, el 1-0.
En el arranque del complemento, cuando la visita no pasaba mayores sobresaltos, una serie de imprecisiones en el fondo entre Enzo Pérez y David Martínez le permitió a Del Prete asistir a Leandro Díaz para que defina bajo y establezca la igualdad.
Entonces llegaron unos minutos de desconcierto absoluto para el puntero, en los que volvió a emerger la figura de Armani para sostener el empate ante un León envalentonado que generó un par de situaciones claras para ponerse en ventaja.
El alivió llegó cuando Julián Álvarez pudo participar un poco más de la generación y encabezó los ataques que volvieron a meter a su equipo en partido. El desarrollo se tornó a partir de allí vertiginoso y de ida y vuelta, pero de a poco ambos fueron dándole valor al punto.
El 1-1 fue justo por lo que se vio en el campo de juego y mientras Estudiantes dio buenos síntomas de recuperación anímica, River mantuvo su racha invicta y buscará ganarle a Patronato en el Monumental para no torcer el rumbo de su camino hacia el objetivo.