¿Qué está pasando en las cárceles argentinas y por qué hay motines y polémica?

En medio de la pandemia por Coronavirus, muchos países siguieron las recomendaciones de organismos internacionales de derechos humanos que pedían evitar hacinamiento en las cárceles y no poner en riesgo la vida de los reos.

Muchas naciones, como Estados Unidos, Italia, Irán, México, Brasil y Reino Unido, han autorizado la liberación temprana, salida temporal o la detención domiciliaria de algunos presos.

¿Qué es lo que pasa en Argentina?

Primero empezaron los motines ante los contagios por parte de personal de seguridad, ante la amenaza, los reos respondieron con violencia y con heridos en varias cárceles de la Argentina.

El pedido de los reclusos es más higiene, reducir el hacinamiento (con detenciones domiciliarias o liberaciones transitorias mientras dure la cuarentena) y además protocolos sanitarios.

Uno de los motivos que generan malestar en la población es que si bien la recomendación era solo otorgar prisión domiciliaria a presos que cometieron "delitos de escasa lesividad o no violentos", algunos jueces sin ningún tipo de escrúpulo, aprobaron beneficios para reclusos condenados por crímenes graves, incluyendo la violación.

Un caso que causó particular indignación es el de un hombre de 68 años, acusado de haber violado a una vecina de 13 años, a quien se le permitió regresar a su hogar, cercano al de la menor.

Víctimas de violencia de género y sus defensores también denunciaron la posibilidad de que los agresores pudieran salir de las cárceles.

Cacerolazos y críticas al Gobierno: 

Todas estas medidas, reproducidas en los grandes medios de manera incesante, han provocado cacerolazos en distintos lugares del país, no solamente contra la Justicia, sino también contra el Gobierno que preside Alberto Fernández, quienes lo señalan como un 'garantista' y que 'no defiende los derechos de las víctimas'.

El presidente tuvo que salir a asegurar públicamente que su gobierno no fomenta una liberación generalizada de presos.

"Es conocida mi oposición a ejercer la facultad del indulto", dijo a través de su cuenta en Twitter el mandatario Alberto Fernández.

"Digo esto en momentos en que una campaña mediática se desata acusando al gobierno que presido de querer favorecer la libertad de quienes han sido condenados", escribió el Presidente en las redes sociales.

Los partidarios de la medida de liberar reclusos que no sean 'peligrosos', afirman que si hubiera un alto número de presos infectados con COVID-19 el sistema sanitario podría colapsar, cosa que se ha logrado evitar hasta ahora gracias al gran esfuerzo de la población que comenzó el 20 de marzo con el aislamiento obligatorio.

El factor político:

Una de las primeras personas a la que se le permitió cumplir su condena en su casa por el riesgo que supone el coronavirus fue Amado Boudou, ex-vicepresidente durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y condenado en 2018 a cinco años de cárcel por corrupción.

Medios y políticos opositores al gobierno de Alberto Fernández señalan que esto es una señal de que el gobierno apunta eventualmente a lograr la impunidad de la propia vicepresidenta, Cristina Kirchner, quien tiene causas de corrupción bajo proceso e inicio de juicio oral en trámite.