El relato de un testigo previo a la muerte de Aramburu

A dos semanas del asesinato a tiros de Federico Aramburu, seguimos conociendo testimonios de lo ocurrido aquella macabra noche a la salida de un bar del distrito 6 de la capital francesa. El ex jugador de la Selección argentina tenía 42 años cuando el pasado 19 de marzo se vió envuelto en una reyerta, que desencadenó en un tiroteo a sangre fría que acabó con la vida de Aramburu.

Tras ser separados después de un enfrentamiento cuerpo a cuerpo, varios de los involucrados en la pelea, volvieron en coche a la escena del suceso y comenzaron a disparar contra Aramburu y otro amigo, provocando la muerte del exjugador profesional. Ahora, un testigo que observó la primera pelea desde la ventana de su apartamento ha narrado lo que vivió con sus propios ojos.

Observó la pelea desde su ventana

Este martes, un testigo de la pelea que precedió al asesinato de Federico Martin Aramburu contó a L’Equipe la historia del altercado que se produjo el 19 de marzo entre el exjugador de rugby y los sospechosos de su asesinato, entre los que se encontraba Loïk Le Priol, uno de los principales señalados, y fuertemente relacionado con movimientos de ultraderecha.

“Esa madrugada estaba durmiendo. Mi ventana es de doble vidrio, pero aún así me despertaron los gritos e insultos. Mi primer instinto fue asomarme a la calle. Eran alrededor de las 5:55 a.m. Es todo muy violento e impactante, pienso que qué habrá hecho ese hombre para recibir esa cantidad de golpes...”, comenta el testigo tras seguir los primeros momentos de la pelea.

“Aramburu estaba ahí, recibiendo sin devolver ningún golpe. Creo que esos dos tipos se ensañaron con el porque su amigo (Shaun Hegarty) es demasiado grande en persona y eso los echó para atras con él”.

A este momento, ya todo el mundo pegaba a todos los demás, formandose una pelea multitudinaria que pronto de disolvería: “Los chicos que se encontraban en el bar reaccionaron muy rápido, he visto peleas antes, pero ahí lo surrealista es la determinación de algunos de ellos para pelear con sangre fría”.

Primeros indicios de lo que después pasaría

A este momento, el testigó atisbo una muestra de la desgracia que se cernía sobre el argentino, cuando el involucrado Loïk Le Priol, junto a uno de sus compañeros, fueron apartados de la pelea: “Recuerdo haber visto a un tipo sujetando a Le Priol que intentaba sacar algo de su bolsillo varias veces... Yo quería gritar, pero no lo hice. Pensé que me tomarian por un psicópata, y me dije a mí mismo que en el peor de los casos sacaría un cuchillo.

Tras esto, hubo unos minutos de calma, lo que hizo que el testigo decidiera que la pelea habia acabado, y no continuase mirando por la ventana, para marcharse a dormir. Esto hizo que no pudiera presenciar el asesinato de Aramburu, puesto que justo cuando acababa de meterse en su cama de nuevo, pudo escuchar los seis disparos contra Federico Martín Aramburu, que provocarán la muerte del argentino.