Valentín Barco, el lateral del futuro en Argentina

Valentín Barco no solo llama la atención por el color naranja de su pelo. O por ser uno de los futbolistas de Boca Juniors que han pedido a gritos dar el salto al primer equipo pese a tener a Frank Fabra por delante en la banda. El lateral izquierdo Xeneize ahora trata de brillar en el Mundial sub-20 de Argentina a las órdenes de Javier Mascherano. Ya se ha convertido en un fijo en la categoría para la Albiceleste, y parece que con Boca las cosas no irán por otro camino ya que es difícil poner trabas a un talento que podría ser especial.

Por eso, una de las cosas que más llaman la atención del Colo, al que sus compañeros de selección Federico Redondo (Argentinos Juniors) y Agustín Giay (San Lorenzo) le deformaron el apodo a “Colorido” y “Colores”, es su personalidad para jugar de una manera con la que no muchos futbolistas de 18 años se permitirían. Pero esa desfachatez o espontaneidad al hacer las cosas es también lo que le hace único. Al menos para su categoría, siendo un aspecto que en el fútbol podría acabar valiendo muchos millones.

En cierta manera, su juego recuerda de una manera algo lejana (todavía) a Marcelo. El actual lateral izquierdo de Fluminense y ex del Real Madrid abordaba los partidos de una forma en la que su juego ofensivo se ponía por encima de todo. De su manejo de la pelota y forma de cubrir la banda, sobre todo para ir hacia arriba, hacía una herramienta que su equipo tenía que explotar. Encarando, ayudando en las combinaciones... A Valentín Barco todavía le falta por evolucionar, pero se ven ciertas cosas que pueden ser similares a las del brasileño, y salvando las distancias, los gestos de ambos se asemejan. También por su tren inferior, el cual le hace tener una conducción en la que aguanta cualquier contacto ante los rivales.

En la Reserva de Boca ya se convirtió en un habitual en algún que otro vídeo que destacaba su capacidad para romper con sus acciones individuales. También con su capacidad de buscar pases que marquen diferencias. Todavía se ha visto muy poco de él al máximo nivel, pero llegado a cierto punto cuando recibe la pelota la sensación es que pueden pasar cosas porque es un lateral muy creativo. En sus botas hay mucho fútbol, y eso que todavía se está viendo la cabeza de un futbolista que podría perdurar en la banda de la selección de Argentina durante muchos años.

Se podría decir que su punto débil en estos momentos se encuentra en la defensa, donde todavía le cuesta dominar bien lo que sucede a su espalda y elegir bien ante ciertas situaciones cuando los rivales atacan. Cuestión de tiempo ver si es algo que fortalecerá para que su juego sea mucho más equilibrado, o si puede convertirse en otro de esos “genios” que maximizan la diferencia entre ataque y defensa por su forma de actuar con el esférico.

Sin haber comenzado a andar dentro del profesionalismo, en Europa podrían llamar dentro de poco a la puerta de Boca para conocer cuál será el futuro del Colo. La Juventus, según Tuttosport, estaría muy pendiente de lo que sucede en el Mundial sub-20 con el lateral. Y es que, pese a que Javier Mascherano todavía parece tener algo atado al bonaerense, la naturaleza de su fútbol le llevan a que en cada situación la jugada le busque para que pueda hacer algo que empieza a mostrar como algo normal, cuando no lo es.