San Lorenzo se desmorona ante Fortaleza

San Lorenzo vivía en El Nuevo Gasómetro su primer enfrentamiento como local en esta Copa Sudamericana. El duelo no era ni más ni menos que ante Fortaleza, el otro equipo que quiere dejar pocas especulaciones al primer lugar del grupo. Con un duelo por todo lo alto entre los dos favoritos para luchar por ese objetivo, el Ciclón quería demostrar que en la competición continental podía plasmar las mismas sensaciones que en la Liga Profesional, en la que está siendo uno de los mejores equipos del campeonato argentino.

La toma de contacto con el encuentro dejó pocas dudas de que este está siendo un buen año para San Lorenzo. Con rapidez y ante su público, que alentó con fuerza en todo momento, los de Rubén Insúa se hicieron pronto con el control del enfrentamiento. Ante Fortaleza, que buscaba robar y salir al contragolpe, el Ciclón hizo fuerte sus costados para ganar metros y buscar a un combativo Adam Bareiro. Malcom Braida y Nahuel Barrios fueron los encargados de hacer que el partido tomara peso por banda izquierda, superando a los rivales en un gran número de ocasiones para generar peligro. No hubo grandes chances, y Fernando Miguel atajó lo que le llegó, pero durante los primeros 45′ la constante fue ir hacia el arco de los brasileños.

El paso por vestuarios no cambio grandes cosas. Con un San Lorenzo que quería seguir mandando con la pelota en su cancha, Tomás Pochettino fue el futbolista que tomó cierto peso en Fortaleza y a través de la banda izquierda desequilibró en ciertos momentos para que su equipo tuviera alguna ocasión. Batalla no tuvo que atajar, pero si hubo una mayor sensación de opciones en los metros finales de los locales. Sin que se percibieran posibilidades de un gol temprano, todo indicaba que una jugada aislada podía cambiar las cosas en el tramo final.

Y cuando parecía que San Lorenzo y Fortaleza firmaban el empate, el descuento trajo la locura a Boedo. El conjunto brasileño dispuso de una falta que colgó al área, y el envío acabó en una finalización del lateral Tiago, que abrió el marcador para los suyos en el 90′ e iniciaba el nerviosismo en el equipo de Insúa. Casi sin que diera tiempo a pestañear, Guilherme en el 92′ ampliaba la distancia en el marcador con un disparo dentro del área a bocajarro, tras darse la media vuelta. Demasiado castigo ante un San Lorenzo que se desmoronó completamente.

El castigo no fue justo con el conjunto argentino, que no recibió otro gol porque el VAR entró en acción para anular el tercer tanto brasileño por una mano. Con ello, los locales se marcharon del encuentro con una sensación amarga de haber perdido un partido en el que tuvieron opciones, ante un Fortaleza que se coloca líder siendo contundente antes del pitido final. San Lorenzo no caía en casa desde septiembre de 2022.