River despachó a Fortaleza

En medio de una seguidilla de victorias con un evidente crecimiento futbolístico, River tenía que recibir a Fortaleza por la segunda fecha del Grupo F de la Copa Libertadores y volvió a demostrar un gran nivel para vencerlo 2-0 sin mayores inconvenientes.

En el inicio del encuentro, los dueños de casa se pararon con las líneas adelantadas para tratar de dominar las acciones y sufrieron con un contragolpe que encabezó Moisés por la izquierda y no llegó a definir por el centro Kayser frente al cierre de Milton Casco.

Desde entonces, los de Núñez empezaron a encontrar espacios a espaldas de los volantes visitantes y a explotarlos hasta que llegó la apertura del marcador. Fue cuando Enzo Fernández capturó un despeje corto en la puerta del área y con un disparo imparable venció a Max Walef.

Con confianza, el equipo de Marcelo Gallardo empezó a desarrollar su juego de circulación rápida y constante búsqueda ofensiva. Aunque dominados durante la mayor parte del tiempo, los brasileños respondían con salidas rápidas por intermedio de Yago Pikachu, uno de los hombres más peligrosos en la primera etapa.

Sin embargo, con una fórmula similar a la del primer gol, los argentinos convirtieron el segundo. Esta vez fue un centro desde la derecha, otro rechazo a medias y una fantástica volea de Nicolás De La Cruz que se clavó junto a un palo.

En esos 45 minutos, el uruguayo se mostró en estado de gracia y, ya con el 2-0 a su favor, River empezó a lucirse moviendo la pelota lejos de su arco e incluso generando opciones para aumentar la diferencia. El descanso, en definitiva, fue un alivio para los de Juan Pablo Vojvoda.

En el complemento, el trámite no cambió demasiado y el control de las acciones siguió siendo de los del Muñeco, que a su vez se acomodaron mejor en defensa y tuvieron menos dificultades en el retroceso.

Sin la intensidad de la etapa inicial, les alcanzó a los de la Banda Roja para administrar los tiempos y sostener el resultado que habían conseguido con justicia.

Lo que a priori se planteaba como un desafío complejo, terminó simplificándose para River que se fue ovacionado por el Mâs Monumental y lidera su zona junto a Colo-Colo, su próximo rival en Chile.