A la altura: Boca ganó y se acomodó

Boca le ganó 1-0 a Always Ready, con gol de Eduardo Salvio, y logró el principal objetivo para seguir dependiendo de sí mismo en el Grupo E de la Libertadores. La próxima semana recibirá a Corinthians y se jugará gran parte del pase a la ronda siguiente del certamen continental.

El Xeneize salió decidido a imponer condiciones y lo logró. Durante todo el primer tiempo manejó la posesión de la pelota, generó chances claras y maniató por completo al conjunto boliviano. Los defensores se adelantaron, los laterales tuvieron protagonismo, Pol Fernández y Óscar Romero fueron decisivos en metros finales y los delanteros estuvieron en zona de gol.

La primera polémica de la noche llegó a los 37 minutos, cuando Eduardo Salvio quedó cara a cara con el arquero rival, cayó al piso tras un involuntario choque y el juez Kevin Paolo Ortega sancionó un penal que no fue. Al Toto poco le importó, ya que cambió tiro por gol y decretó el 1-0 parcial.

Agustín Rossi tuvo que hacer su trabajo y sostuvo al equipo en las únicas dos que lo probaron: primero, un cabezazo que pico antes de llegar a sus manos; segundo, un remate de media distancia que la desvió por encima del travesaño. Poco y nada para los rojiblancos, que no hicieron demasiados méritos para sobreponerse ante los de la Ribera.

La tendencia en el inicio del complemento cambió por completo: con el argentino Marcos Riquelme en cancha, el equipo creció y en los primeros 5 minutos tuvo dos chances clarísimas. Una en la cabeza del atacante, otra en los pies de Alex Rambal, quien reventó el palo. Boca, dormido y sin reacción.

Sebastián Battaglia movió el bancó, quitó a Luis Vázquez y a Juan Ramírez, de flojísimo partido, y mandó al campo a Nicolás Orsini y Cristian Medina. El ex atacante de Lanús generó la primera clara de Boca, que regaló un poco la tenencia, se replegó algunos metros y apostó a sorprender con alguna contra antes que manejar los hilos como antes.

Con centros cruzados, que siempre complican a la defensa boquense, Always Ready fue en busca del empate, pero otra vez chocó contra la muralla de Rossi. El Xeneize apostó a contener el medio, por eso ingresó Jorman Campuzano en lugar del paraguayo Romero, y le faltó eficacia en metros finales para liquidar la historia. Medina apareció solo por el segundo palo tras un córner desde la izquierda, pero falló su cabezazo de manera increíble.

Los minutos corrieron, el reloj se fue consumiendo, Boca logró planchar el encuentro y aprovechó un acto de indisciplina de Mauricio Cortéz, quien golpeó a Frank Fabra y a Jorman Campuzano (planchazo en medio de un tumulto) y se fue expulsado. Con alma y vida defendió el triunfo, sumó tres puntos vitales para acomodarse en su zona y terminó la noche en puestos de clasificación a octavos de final. Objetivo cumplido: sí, a la altura en la altura.