El Abierto de Australia se quedó sin argentinos

El Australian Open se quedó prematuramente sin argentinos en su cuadro de singles. Diego Schwartzman cayó ante Christopher O'Connell (175º ranking ATP) y Sebastián Báez no pudo ante Stefanos Tsitsipas (4º) en lo que fue una nueva jornada negativa para las raquetas nacionales.

En el arranque de la mañana australiana, Diego Schwartzman sufrió una sorpresiva y dura derrota ante el local Christopher O'Connell (175° del ranking ATP) y se despidió del primer Grand Slam del año en segunda ronda. Fue por 7-6(8-6), 6-4 y 6-4, en tres horas y siete minutos.

Schwartzman tuvo un primer set parejo en el que pudo ser para cualquiera. Pero los puntos claves los empezó a ganar el aussie, quien con la inyección anímica de la gente en una repleta cancha 3, sorpresivamente se quedaba con el segundo set por 6-4.

Ya en el tercero, O'Connell volvió a tomar la iniciativa quebrando el saque del 'Peque'. A pesar de una reacción final por parte del 13 del mundo, el tenista oceánico lo cerró jugando el partido de su vida y el 6-4 final desató la locura del público y la decepción de Schwartzman al sufrir una de sus peores derrotas de su carrera. Ahora, se enfrentará al estadounidense Maxime Cressy (70 del ranking ATP).

Báez, sin chances ante Tsitsipas:

Sebastián Báez jugó muy bien los dos primeros sets de igual a igual, pero se impuso la jerarquía y la experiencia del número 4 del mundo, Stefanos Tsitsipas. En la madrugada argentina, el griego soportó los embates del tenista porteño y se llevó el partido de segunda ronda por 7-6(1), 6-7(5), 6-3 y 6-4.

Con esta derrota, se extinguió la última llama argentina en el cuadro de singles, quien venía de ganar su primer partido en un Grand Slam ante Albert Ramos Viñolas. El camino de Stefanos continuará ahora ante el francés Hugo Gaston en tercera ronda.