Arenas Fútbol Club, el lugar donde todas pueden jugar

Este artículo forma parte de la campaña Deja Buena Huella, con la que PRISA reafirma su compromiso con la Agenda 2030 y anima a los ciudadanos a ejercer su poder de acción para el desarrollo sostenible.

Paraná es la ciudad capital de Entre Ríos, provincia ubicada en el noreste de Argentina, en la región Mesopotamia. Se sitúa al oeste de la provincia, sobre la margen izquierda del río que la bautizó y posee 137 km² de territorio. Según el Censo de 2020, tiene una población de 247.863 habitantes, transformándose así en la ciudad más poblada de la provincia.

Paraná tiene, además, la primera escuela de fútbol femenino en la región, fundada en 2014. Se trata de Arenas Fútbol Club, una institución sin fines de lucro que se dedica a la formación y a darles la oportunidad a niñas, adolescentes y mujeres adultas de que puedan jugar al fútbol, ya sea de manera recreativa o competitiva.

"Arenas para mí es la vida misma", cuenta Carolina Benke, quien se animó a materializar este "sueño", y asegura: "Arenas es pasión, es amor, es sanación, es fe de que todo puede cambiar y mejorar".

Benke tiene 33 años, es profesora de educación física y también es mediocampista de Argentino de Rosario, equipo que milita en la segunda división del fútbol femenino de Argentina. Además, vistió la camiseta de la Selección argentina en el Selectivo Sub 20 y Mayor entre los años 2006 y 2007. Pero, como si fuera poco, es una de las personas que soñó, militó y creó Arenas FC, club que llegó a Paraná para quedarse y que, año tras año, fue creciendo. Tanto, que hoy tiene más de 200 personas asociadas.

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"Arenas nace por un deseo propio de querer seguir ligada al deporte después de una grave lesión en la rodilla derecha que tuve. Fue entonces cuando decidí iniciar con la escuelita. Fue resignificar eso que por ahí no tuve cuando era más chica, que alguien me enseñara a jugar al fútbol, el tiempo, el espacio, la dedicación", relata. Y es que, antes de que surgiera este club, las niñas y las mujeres de la región no tenían un lugar al que poder acudir para hacer eso que tanto les gusta, que tanto aman: jugar al fútbol.

Como sucede con casi todo lo nuevo, Arenas tuvo su resistencia al instalarse en Paraná, allí donde el fútbol era pensado solo para varones, por lo que mujeres debían o sumarse a equipos masculinos, o conformarse con patear en una plaza, en la calle, y soñar con una camiseta con el número en la espalda y con enfrentarse a equipos de la misma categoría y con trabajo similares.

"Éramos como los bichos raros del fútbol en Paraná y del fútbol femenino también porque somos independientes de un club, porque nosotros nos hicimos solos. Las resistencias fueron a nivel social, decían 'che estos qué están haciendo, qué es eso de fútbol femenino infantil, escuelita, que mujeres estén dirigiendo, que sean profes'. Pero ya hace ocho años que estamos y venimos haciendo un trabajo enorme, trabajo de hormiga para romper todo eso", recuerda Carolina y promete que esto seguirá creciendo: "Hemos derribado algunas barreras, pero aún falta".

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Arenas FC, explica Benke, es diferente a otras escuelas porque busca "romper con los esquemas, barreras, formas que el fútbol tiene impregnado en sí y hacerlo desde cero, desde la formación, desde los valores". Además, resalta, "no sólo se considera a la mujer como una deportista más, sino que también hay un montón de jugadoras que son profes y vuelcan su experiencia en esto y hay un montón de familias que colaboran".

Para sumarse a Arenas FC las personas interesadas deben buscar Escuela Arenas Fútbol Femenino en Instagram, o Arenas FC, en Facebook, donde pueden conocer horarios y días de entrenamientos. "Son todas bienvenidas, no importan las problemáticas ni las realidades", resalta Benke e invita a sumarse a este gran equipo.