GONZALO HIGUAÍN
"En el fútbol, les importa un bledo la vida de la gente"
Gonzalo Higuaín, reflexivo, cuenta cómo lleva sus años en el Inter de Miami, liberado de las presiones y cómo fue llevando sus últimos años en el fútbol.
A corazón abierto, Gonzalo 'Pipita' Higuaín, habló con ESPNF90 sobre su vida en Estados Unidos, lo que padeció tras la final del Mundial 2014 y su vida en los útltimos años, de Juventus a la MLS.
En la MLS, sin las presiones de ser gloria o fracaso: "Por la campaña que hicimos, en otro país la crítica hubiera sido 10 veces peor y no podías salir a la calle. Acá valoran al tipo de jugador que vino a jugar esta liga y a este equipo. Estoy muy feliz en todo, a nivel deportivo, estoy con mi hermano. Fue un año muy duro para mí en lo individual por lo de mi mamá y la pandemia. Ver sonreír a mi hija es el motor del día a día".
La tranquilidad de Higuaín luego de la tormenta: "Estoy pasando uno de los mejores momentos de mi vida a nivel emocional y personal. Disfrutando el crecimiento de mi hija, de estar con mi mujer. Después de un año tan difícil que tuve con lo de mi mamá, tener ese sostén fue algo maravilloso. Disfrutar de una ciudad maravillosa, la seguridad, ir a tomar un helado con mi hija. Vivir esos momentos que antes, con la presión y exposición, no se podían vivir".
La obtención de la Copa América por parte de la Selección Argentina: "Es una alegría enorme por ellos 4 (sus ex compañeros Messi, Di María, Agüero, Otamendi), me puso feliz porque a los chicos se les pudo dar. Lamentablemente a mi se me ha marcado por el resultado final y no por el recorrido que tuve en la Selección".
La familia, el sostén: "Es algo soñado ganar títulos, ser goleador, meter millones de goles, ser respetado y querido, pero los momentos con tu hija mano a mano o terminar un partido y que venga a abrazarte y te vea siempre como un héroe, ganes o pierdas, no lo devuelvo por nada del mundo. Son cosas que me llenan el alma".
¿Vuelve a la Argentina?: "El fútbol es una selva en la que cada uno tiene que cuidarse el culo. Mi cabeza está proyectada en cumplir el contrato en Inter de Miami, no hay ninguna posibilidad de que me vuelva a meter en la burbuja de la presión y no poder salir a la calle. No, no hay chance. Estoy muy tranquilo conmigo mismo y cuando uno está en paz con uno mismo, le hace bien a los demás. El amar es dar, no recibir. Estoy dando todo porque mi familia esté feliz y no soporte lo que ya soportó durante tantos años. Veo a mi papá, mis hermanos, mi mujer y mi hija felices, ¿por qué lo voy a cambiar? ¿Vale la pena lo que viene atrás?".
Lo que hizo Gonzalo cuando se enteró del cáncer de su madre: "Fui a Argentina y le dije que hasta que no se curara, no iba a jugar más al fútbol. Me pelé por ella. Me respondió que se iba a morir antes porque no iba a permitir que dejara algo que yo amaba por ella. Entonces seguí jugando por ella. Iba a dejar el fútbol porque para mí pasó a un quinto plano".
El fútbol, divorciado de los hinchas: "Cuando volví a Argentina en la pandemia no quería volver a la Juventus porque me parecía una aberración que se siguiera jugando con la cantidad de muertes que había. En el fútbol, más allá de lo que mueve, les importa un bledo la vida de la gente. Se siguió jugando para mantener la cabeza ocupada de los que estaban encerrados en su casa. No quería volver y recibí muchas críticas por decir lo que sentía".
El legado de la madre de 'Pipita': "Cuando éramos chicos, mi mamá siempre nos decía una frase que tenemos escrita en una pared de casa: Barrenderos con el alma. Te toque lo que te toque ser en la vida, nos decía que lo hiciéramos con el alma. Si te toca lo que te gusta, mejor; si no, como le pasa a mucha gente que admiro, también ponerle el alma para que sea todo más fácil. Hoy que no la tengo, me acuerdo y valoro todo lo que me enseñó desde el lado sensitivo, del amor, de criar, de disfrutar de las simples cosas de la vida".
Higuaín y el 'fútbol moderno': "Al fútbol lo amo y amaré siempre. Lo disfruté y padecí. Últimamente me está gustando cada vez menos verlo. El otro día terminé viendo PSG-Manchester City en el teléfono porque mi hija quería ver los dibujitos en la televisión, cambió el orden de las prioridades, ja. Me gusta cada vez menos porque cuando dicen que no salen tantos talentos en Argentina y el mundo es porque la tecnología, los espacios reducidos y el jugar a dos toques quitó la gambeta y el uno contra uno. La obligación de jugar a dos toques lleva al jugador a jugar así porque si no el técnico lo caga a pedos. Se perdieron cosas. Es todo tan vertical y jugar a dos toques que se ven menos jugadores de gambetas".
Los sacrificios del jugador de fútbol: "La gente dice ‘vos andás en barco, tenés millones, mirá en la casa que vivís’. ¿Y?, ¿y? La gente está confundida, a mí nadie me regaló absolutamente nada. Si tengo lo que tengo es porque me rompo el traste desde los 9 años. Ni mendigué ni pedí por favor, pedí lo que creí que merecía por lo que daba por cada club en la cancha. Siempre superé obstáculos y tuve que meter goles y goles para pedir mejoras. Hablan con el diario del lunes después de la carrera que hice. Pasé cumpleaños sin mis mejores amigos, me fui al Mundial de Rusia al día siguiente del nacimiento de mi hija, tuve que volver rajando a Argentina cuando a mi mamá le pasó lo que le pasó".
El 'ejemplo' de ser futbolista: "Atrás del jugador de fútbol hay un montón de sacrificios. Si vas a tomar un helado, se fijan si te ponés tres bochas de helado para decir que no sos profesional y, si te ponés una, dicen que te cuidás. ¿De qué estamos hablando, muchachos? Hay que disfrutar la vida y que te la dejen disfrutar. Nosotros no somos los que tenemos que dar el ejemplo con cuántas bochas de helado comemos o cuántas copas de vino tomamos, el ejemplo lo tienen que dar los que matan, asesinan, abandonan a sus hijos o padres. En Estados Unidos me encontré con eso y, cuando te encontrás con eso, no querés volver más a lo otro".