BOCA JUNIORS
De Boca a Bragantino: la odisea de Jan Hurtado para llegar a Brasil
El jugador venezolano se marcha cedido al club brasileño por un año. Para poder llegar a su destino, Hurtado deberá hacer un recorrido inusual por la crisis del coronavirus.
Jan Hurtado jugará cedido en el Red Bull Bragantino por un año. El jugador venezolano llegó a un acuerdo con Boca Juniors para seguir creciendo como jugador en el Brasileirão y este miércoles partirá rumbo a su nuevo destino tras obtener el permiso especial de trabajo. Para poder llegar a Brasil, Hurtado deberá pasar por toda una odisea debido a la crisis del coronavirus que tiene a Sudamérica como foco principal.
El venezolano saldrá hoy en un vuelo desde La Plata, pero ante la imposibilidad de cruzar Brasil por el aire por las restricciones marcadas por la pandemia, tendrá que aterrizar en Puerto Iguazú, justo en la frontera con Brasil. Después, el delantero de 20 años tendrá que hacer por tierra el recorrido hasta llegar a Foz de Iguazú, ya territorio brasileño. Allí, cogerá un nuevo avión que le llevará hasta Sao Paulo.
Una vez asentado en su nuevo país de destino, Hurtado será presentado como nuevo jugador de Bragantino, pero sin aficionados presentes. El conjunto propiedad de Red Bull han pagado un total de 150 mil dólares por el préstamo del internacional de la Vinotinto, que no ha logrado asentarse en Boca. Además, se guardan una opción de compra de 5.5 millones de dólares.
El jugador formado en Deportivo Táchira, vivió su mejor momento en Gimnasia y Esgrima La Plata, despuntando especialmente en el final de la Superliga 2019 y la Copa de la Superliga disputada ese mismo año, en la que el Lobo llegó hasta cuartos de final. Aquello llamó la atención de la directiva xeneize, que consiguió ficharlo en julio del año pasado. En La Ribera comenzó teniendo protagonismo, pero ante su falta de acierto Alfaro relegó al delantero al banquillo y con la llegada de Miguel Ángel Russo no ha sumado minutos (estuvo lesionado unas semanas).
En total, Jan Hurtado ha disputado 18 partidos con la azul y oro (702 minutos), en los que sólo ha marcado dos goles, números muy pobres para una de las mayores promesas del fútbol venezolano. En Bragantino, el delantero buscará volver a tener un papel importante para seguir teniendo continuidad en las convocatorias de la selección venezolana.