Apertura cines, teatros y shopping: medidas, protocolos y aforo para acceder
El Gobierno tomará influencia de otros países para elaborar un protocolo. El distanciamiento, la limpieza y reducir al 50% el número de usuarios en simultáneo, en la balanza.
Argentina empieza a dibujar la senda del regreso a la "nueva normalidad", organizando cómo será la reapertura de los espacios que más peligro suponen de cara a la transmisión del virus, es decir, los que generan más aglomeración ciudada: cines, teatros, gimnasios, shopping...
La crisis económica y las necesidades básicas de la población a la hora de percibir una suma monetaria para hacer frente a las deudas obliga a las autoridades a elaborar un protocolo que compatibilice la reapertura de los espacios con la seguridad sanitaria de los ciudadanos.
Ante este contexto, el Gobierno ha decidido dotarse de la influencia exterior para elaborar un camino fiable en este sentido. Hay tres pilares básicos: el distanciamiento social, la limpieza y reducir al 50% el número de usuarios en simultáneo.
Bajo esas tres columnas se sostendrá el protocolo argentino para regresar, poco a poco, a la vida. Según vayan avanzando los días y en función a la evolución positiva que vaya reflejando la pandemia, estas medidas se irán volviendo cada vez más flexibles.
Los gimnasios
"Las máquinas estarán separadas a dos metros, las clases grupales van a tener poca gente y se va a marcar en el piso tu espacio y por dónde debes acceder. Además, habrá una máquina de limpieza cada 50 metros, se establecerán esquemas intensificados de desinfección y para reducir la concurrencia utilizaremos un sistema de turno", explicó Storchi.
Los grupos de riesgo no podrán utilizar, de momento, las instalaciones y las personas que accedan deberán pasar un control de temperatura, además de firmar una declaración donde juran no tener síntomas.
Las bodas
Las autoridades sopesan que los invitados deberán enviar una declaración jurada de que no tienen síntomas para poder asistir al evento. Una vez allí, se establecerán normas de entrada y salida especiales, así como "un espacio para los adultos mayores de cara a que puedan mantener la distancia entre las mesas", dijo Amarante.
"Se estaría perdiendo lo que es un evento. Una boda son los amigos del novio colapsando en medio de la pista con alegría y júbilo", agregó. En ese sentido, el horizonte está puesto en el próximo año.