Coronavirus: ¿en qué consiste el tratamiento cordobés con ibuprofeno?
Una solución nebulizable, con efectos antiinflamatorios y antibacterianos, inactivaría al coronavirus e impediría su propagación. Ha sido probado con éxito en cinco pacientes.
El desconocimiento general sobre el nuevo coronavirus al que aluden las autoridades sanitarias mundiales provoca que se puedan emitir, al menos por el momento, verdades absolutas sobre aspectos como su origen, comportamiento, efectos o tratamiento. Al hilo de este último aspecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) cuestionó la eficacia del ibuprofeno en el tratamiento de pacientes infectados, sin embargo, un tratamiento con este popular medicamento e inducido como base e inducido con nebulizador como base podría resultar esperanzador.
Investigadores del Centro de Excelencia en Productos y Procesos de Córdoba (CEPROCOR) han descubierto, además de las ya conocidas y sabidas propiedades antiinflamatorias, potencial como antibactericida, lo que funcionaría para detener al virus y evitar su propagación. Este tratamiento, en colaboración con la empresa privada Química Luar y con el apoyo del gobierno provincial, se ha venido utilizando en pacientes aquejados de fibrosis quística o en otros como la enfermedad pulmonar obstructiva (EPOC), similar al coronavirus en cómo afecta a los pulmones. En estos tratamientos se descubrió que el ibuprofenato de sodio, uno de los componentes, podía actuar destruyendo el genoma del virus y su comportamiento celular.
"Tiene muchas propiedades, pero es insoluble en agua. Nosotros logramos que sea soluble (ibuprofenato de sodio) y creamos una solución hipertónica (con alta concentración de sal) para nebulizar a pacientes con fibrosis quística", explicó a La Voz del Interior, Dante Beltramo, investigador del CONICET en el CEPROCOR, como aspecto clave del tratamiento. De esta manera, y en un proceso similar al que se ha venido practicando en la prueba experimental frente al coronavirus, la nebulización permite introducir el ibuprofenato de sodio en la membrana lípídica del virus, inactivarlo y evitar que se propague. Es decir, funcionaría "como un jabón".
Pero no solo eso, si no que sería también muy efectivo en las consecuencias proinflamatorias más graves del SARS CoV-2 en los pulmones, disminuyendo notablemente, por tanto, la sensación de ahogo y mejorando la respiración. Además, también influiría en cómo el virus entra en la célula: "Puntualmente actúa sobre la actina, una proteína que les da estructura a las células. Son trabajos de modelización y también experimentos con ibuprofeno para tratar ébola con buenos resultados", detalló Beltrano.
Evaluado por comité de expertos tras una exitosa prueba inicial
"COVID-19 no tiene tratamiento específico, entonces surge la necesidad de recomendar medicamentos que no están aprobados", señalan desde el Ministerio de Salud de Córdoba, cuyos expertos están evaluando un mecanismo de uso compasivo ampliado de este tratamiento innovador sobre 40 pacientes internados en el Nuevo Hospital San Roque.
"Tras cinco días de nebulización, el hisopado dio negativo y revirtieron síntomas como la pérdida del olfato", reveló Luis Argañarás, socio gerente de Química Luar, tras evaluar los resultados de los tres pacientes jóvenes a los que se les aplicó. Los otros dos pacientes, de 75 años y necesitados de respiradores, "en cinco días estaban impecables. Los médicos no lo pueden creer. En un día, el nivel de saturación subió a 97 por ciento con asistencia de oxígeno y a los tres días llegó a 95 por ciento sin asistencia", afirmó, calificando los datos como "esperanzadores".