Los motivos que provocaron la furia de Messi con el arbitraje

Lionel Messi descargó toda su furia en la zona mixta tras la derrota de Argentina por 2-0 ante Brasil en la primera semifinal de Copa América. El capitán de la Selección Argentina explotó contra el polémico Roddy Zambrano, que no cobró dos penales clarísimos a favor de la Albiceleste. Pero esas no fueron las únicas jugadas que explican el enojo de Leo y todos sus compañeros.

Minuto 8 y Tagliafico “baja” a Gabriel Jesús muy cerca de Lionel Scaloni. La falta fue absolutamente exagerada por el delantero de Manchester City, pero Zambrano le compró la actuación y sancionó al lateral del Ajax con una tarjeta amarilla.

Luego, una pelota dividida entre Marcos Acuña y Dani Alves terminó con un claro codazo del capitán brasileño. El ‘Huevo’ se enojó con su rival e insólitamente recibió primero la tarjeta que el lateral local. Antes, además, Zambrano dejó pasar un golpe de Casemiro en la mitad de la cancha.

En el segundo tiempo, una mano de Alves pudo significarle la segunda amarilla y con ello la expulsión, pero el juez ecuatoriano no quiso hacerlo. Aparte, en la jugada previa al 2-0 de Firmino, el propio Alves cometió un penal gigante a Kun Agüero. Juan Foyth paró porque escuchó un pitazo, pero de eso se aprovechó Gabriel Jesús para asistir al goleador de Liverpool.

Zambrano no acudió el VAR porque jamás le señaló que era una jugada para revisar. Pudo haber cambiado todo: de un 0-2 en contra, a un posible empate de penal más la roja para Alves.

Luego, Arthur le dio un claro golpe a Otamendi en el área. Era penal que tampoco revisó el VAR.

Así, los reclamos de Messi y compañía están más que justificados. “No es excusa”, dijo Leo, pero lo concreto es que Argentina fue perjudicado y, si los árbitros usaban correctamente las herramientas a disposición, la historia quizás hubiese sido diferente.