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SELECCIÓN ARGENTINA

La importancia del acierto

En un partido con muchas cosas para mejorar, la intención de Scaloni con los cambios se vio reflejada en la cancha y Argentina pudo respirar más tranquila.

Buenos Aires
La importancia del acierto
MATILDE CAMPODONICOPool via REUTERS

Durante su corta carrera como entrenador, a Scaloni se le achacó mucho la falta de toma de decisiones en los segundos tiempos o la tardía toma de la misma. Ese hecho fue cambiando poco a poco con el conocimiento de su equipo y jugadores y contra Uruguay, cuando más falta hacía, el técnico movió el banco de suplentes de manera indicada.

Para empezar, al inicio del segundo tiempo, Scaloni (ayudado por la decisión de Dybala de no seguir en el equipo por una molestia) mete a Joaquín Correa con Lautaro. La intención del cambio era alargar al equipo y aprovechar la velocidad del Tucu ante una Uruguay que estaba cómoda siendo corta y presionando alto. Con ese cambio, el 'doble 9' le dio resultado a Scaloni durante muchos minutos.

Pero esto no duró mucho, porque Tabárez también ajustó su equipo y Scaloni tuvo que volver a mover el tablero. Esta vez necesitaba toque en el medio y también calidad y desborde, por lo que sacó de la cancha a Lautaro y Di María, dos jugadores que no estaban teniendo mucha intervención para dar entrada al otro Correa y al Papu Gómez.

Con estos cambios, Argentina cambió el partido. A Uruguay le costaba agarrar la pelota y robar rápido porque los dos 'chiquitos' tienen la capacidad de gambetear y además jugar rápido. Uruguay, además de pensar en robar, se tenía que preocupar por los ataques de ellos y el del Sevilla casi hace un golazo de zurda.

Con tres cambios, Scaloni había arreglado un poco el equipo. Es verdad que Uruguay tuvo chances, pero esto hizo que fueran menos. Quizá el único pero fue la continuidad de Guido en la cancha, de mal primer tiempo, pero Scaloni lo mantuvo y en el segundo fue algo más consistente.

Messi y Palacios por Lo Celso y De Paul fueron los últimos cambios. El del PSG no entró mucho en juego y tuvo algún detalle, mientras que el ex River cumplió con su cometido pero tampoco fue determinante, como si lo fue Papu Gómez para el devenir del segundo tiempo.

Scaloni sabe muy  bien de la importancia de los cinco cambios en estos encuentros y más que nunca debe mantener a todo el grupo expectante de una posible entrada al terreno de juego.