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BOCA JUNIORS

Un mes para aferrarse a una idea y sostenerla

Lo ocurrido en Mardel lo confirmó: Boca rinde mucho mejor cuando junta pases en el medio y juega con enganche. Se viene la final de Copa Argentina: prohibido autodestruirse.

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MAR DEL PLATA, ARGENTINA - NOVEMBER 08: Sebastian Villa of Boca Juniors dribbles past Aldosivi’s goalkeeper Emiliano Vecchio as he runs to score his team’s third goal during a match between Aldosivi and Boca Juniors as part of Torneo Liga Profesional 2021 at Estadio Jose Maria Minella on November 8, 2021 in Mar del Plata, Argentina.  (Photo by Marcos Brindicci/Getty Images) *** BESTPIX ***
Marcos BrindicciGetty Images

Boca ganó jugando bien y es noticia. El Xeneize impuso condiciones en Mar del Plata, le generó muchísimas situaciones de gol a Aldosivi, mostró buen fútbol y se ilusionó de cara a su próximo gran desafío: la final de la Copa Argentina.

Sebastián Battaglia, disconforme con lo hecho en la semifinal frente a Argentinos en Mendoza, metió mano y cambió el esquema. La movida de fichas le salió bien y además le confirmó que cuando incluye cuatro volantes en el medio, la cosa va mejor. No solo porque la presencia de un enganche traiga buenos recuerdos, sino porque con un tipo encargado de la creación, el equipo se suelta y forma sociedades de manera frecuente.

Ahora, después del 3-0 frente al Tiburón, llega el turno de algo que parece fácil, pero no lo es: aferrarse a una idea de juego, sostener un esquema, darle confianza a algunos futbolistas y seguir caminando hacia adelante, pero sosteniendo una identidad. De nada servirá mutar otra vez, como ocurrió en ciertos momentos de este segundo semestre, y tirar al tacho todo lo bueno que se consiguió desde que el León se sentó en el banco de suplentes.

Los dirigentes, el Consejo de Fútbol, los hinchas, los jugadores y hasta el propio Battaglia sostienen que "Boca debe ser protagonista en cualquier cancha". Ese era, es y será el deseo de Juan Román Riquelme, líder futbolistico de esta gestión. Por eso, toque quien toque en el partido decisivo del certamen más federal del país está prohibido especular y traicionarse. Queda un mes para corregir errores, pulir detalles y, sobre todo, abrazarse a una estilo que pregone el juego asociado y deje un tanto de lado a las apariciones indivualidades que se convierten en salvavidas.