A 50 años del debut de Alonso, una gloria riverplatense

Un domingo como hoy, pero hace 50 años, nacía una leyenda en el fútbol argentino. El chico Norberto Osvaldo Alonso hacía su debut en la Primera de River y se iniciaba una nueva historia de amor e idolatría para los hinchas del Millonario.

El Beto, que se había destacado en las Inferiores en Núñez, fue promovido por Didí y enseguida demostró sus enormes condiciones. Pese a que solo tenía 18 años, su estilo de juego y su desparpajo dentro de la cancha deslumbraron a los riverplatenses.

Después de ser figura y bicampeón en 1975, se fue al Olympique de Marsella francés, pero regresó en 1977 para volver a brillar con la Banda Roja.

En 1978 formó parte del plantel de la Selección Argentina que se consagró campeona del mundo en el Estadio Monumental, con el número 1 en su espalda (los dorsales se asignaban por orden alfabético).

Ángel Labruna lo cobijó como su indiscutido 10 y ganó otros cuatro títulos en el club de sus amores entre 1979 y 1981. Tras un conflicto con Alfredo Di Stéfano, pasó a Vélez, pero retornó a Núñez en 1984 para terminar de darle forma a su leyenda.

En su último año como profesional, 1986, ganó el Campeonato de Primera División, la Copa Libertadores y la Intercontinental, además de haber dado la vuelta olímpica en La Bombonera el día de la famosa pelota naranja.

Tuvo una despedida acorde a su figura en junio de 1987 y entró para siempre en el Olimpo de los máximos ídolos de la institución.

Desde esta semana, tendrá su homenaje en el Museo River, con una muestra temporal de objetos a la que podrán acceder todos los visitantes del establecimiento.