Los planes que tenía Maradona en su recuperación
El hijo de Fidel Castro ofreció hospedaje al astro en Cuba para que recuperase la salud fuera de los focos de Argentina. El círculo de Diego planeaba aceptar la invitación.
En la tarde de este miércoles, la muerte Diego Armando Maradona era un seísmo que agitaba el planeta entero. El eterno '10' no lograba vencer la batalla contra el hematoma subdural del que fue operado y su corazón dejaba de latir. Sus últimos días los pasó en su casa de Tigres, pero tanto el astro como su entorno tenían planes para continuar la recuperación, en cuanto el estado de salud del Diez fuese lo suficientemente rocoso como para viajar en avión. Según publicaba el diario La Prensa, el pasado 12 de noviembre tras la operación, el círculo de confianza del Diego planeaba aceptar la invitación Tony Castro, hijo de Fidel, para que Maradona pasase la siguiente etapa de su recuperación en Cuba.
En cuanto Tony Castro supo del estado de salud del Pelusa se puso en contacto con el círculo más íntimo del exfutbolista para ofrecerle estancia en la isla, donde les aseguraba que contaría con toda la privacidad y condiciones necesarias para agilizar el proceso de recuperación. Los más cercanos a Maradona barajaron la posibilidad y consideraron que alejarse del ruido mediático de Argentina sería una decisión más que positiva para el estado de salud del ídolo.
Por todo ello, planteaban un viaje en el que Diego estaría acompañado por alguna de sus hijas, además de un grupo de contención. En el medio argentino desgranan ese círculo de confianza que mencionamos, el cual estaría compuesto por Leopoldo Luque, su doctor, sus hijas Dalma, Gianinna y Jana y sus hermanos y hermanas. Desgraciadamente, las condiciones para que ese viaje se llevara a cabo no llegaron a cumplirse...
Pasado en Cuba
La relación de Maradona con Cuba y Fidel viene de lejos, pues llevaba tatuado al Che Guevara en un antebrazo y a su amigo Fidel en la pantorrilla. "Fidel, si algo he aprendido contigo a lo largo de años de sincera y hermosa amistad es que la lealtad no tiene precio, que un amigo vale más que todo el oro del mundo, y que las ideas no se negocian", rezaba la carta que dedicó Maradona a su amigo en 2015, cuando este padecía de serios problemas de salud, como bien recoge El País. En la isla se sintió querido y ya sirvió de bálsamo en el pasado, pues Cuba acogió a Maradona en su periodo de rehabilitación por su adicción a la cocaína.