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LIGA PROFESIONAL DE FÚTBOL

Vuelve el fútbol: comienza la Liga Profesional de Fútbol

Una nueva competición y un nuevo formato en el que prima la estabilidad a la competitividad. La ilusión y el talento, principales motivos para confiar en que va a ser un éxito.

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Vuelve el fútbol: comienza la Liga Profesional de Fútbol

227 días. Ese es el tiempo que lleva el fútbol argentino parado por la pandemia del coronavirus. Pero la espera ha terminado. A las 19:00 de la tarde, Gimnasia y Esgrima de la Plata y Patronato volverán a la competición y, con ellos, la ilusión de millones de hinchas que esperaban con ansias el reinicio de una de las mejores ligas del continente.

Han sido más de siete meses muy duro para clubes. Muchos de ellos, afectados por la grave crisis económica, han llegado a su límite. También para los jugadores, que se han entrenado sin descanso, primero en sus casas y luego en las diferentes ciudades deportivas, sin saber cuando iban a volver a jugar. Sin embargo, la estabilización en la curva de contagios en el país y, tomando como ejemplo el resto de competiciones, ha sido posible organizar un regreso seguro para todos.

Además, es el día uno de la Liga Profesional de Fútbol, el nuevo torneo organizado por la Asociación de Fútbol Argentino (AFA). Punto y final para la Superliga y para el formato que estaba vigente desde 2017. Claudio Tapia y Marcelo Tinelli, presidentes de AFA y de LPF respectivamente, han preparado un nuevo torneo en el que prima la seguridad sanitaria pero que, deportivamente, genera ciertas dudas.

Lo más llamativo es que, intentando alcanzar una estabilidad económica de los clubes a medio y largo plazo, han decidido eliminar los descensos para las próximas dos temporadas. Una medida que pone el riesgo el nivel competitivo.

También provoca recelo un formato de grupos que presenta poco incentivo para los grandes, que estarán más centrados en la Copa Libertadores. Boca y River llegan en gran estado de forma a este arranque del torneo local, que se ha convertido en un bálsamo para el primero (tres títulos en cuatro años) y en una maldición para el segundo (no ha sido capaz de levantarlo en la era Gallardo y perdió el pasado en la última jornada).

Pero más allá de todo, están las ganas de volver a ver a los mejores competir dentro de una cancha. A falta de la gente (ausente en las canchas por la pandemia), el talento deberá primar para que el torneo argentino sea grande otra vez. Que comience el show.