ARGENTINA
Quién era Facundo Astudillo Castro y en qué punto está el caso
El 30 de abril salió rumbo a Bahía Blanca, pero nunca llegó a destino. Su cuerpo fue hallado el 15 de agosto en un cangrejal. Denuncian desaparición forzada de persona.
Facundo Astudillo Castro salió de su casa, en Pedro Luro -provincia de Buenos Aires- rumbo a la localidad de Bahía Blanca, donde vive su ex novia, el 30 de abril a la madrugada. Su plan era recorrer esos 121 kilómetros que separan ambas localidades haciendo dedo, por la Ruta Nacional 3. Sin embargo, el joven de 22 años nunca llegó a destino.
Ese 30 de abril, Facundo fue demorado por policías de la localidad de Mayor Buratovich (a 30 km. de su casa) por violar el aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia de coronavirus. Allí le labraron un acta de infracción y llamaron a la madre para corroborar el domicilio de Facundo e informarle del acta a su mamá, Cristina Castro. La imagen de Facundo junto a una camioneta policial en Mayor Buratovich es la última de él con vida.
Siguiendo la cronología de los hechos (reconstruídos según declaraciones), ese 30 de abril al mediodía Facundo se comunicó con Cristina y le dijo "no sabés dónde estoy, no me vas a volver a ver", según el relato de a propia mujer. Luego vuelve a ser interceptado, pero en el acceso a Teniente Origone y, desde su celular se envía un mensaje de texto a Juan, un amigo con el que trabajaba en una cervecería. "Juan estoy sin señal ni bateria, en un rato te llamo". Fue el propio Juan quien desconfió del mensaje por las palabras utilizadas. "Diría que no fue escrito por él", aseguró Juan. El registro de la activación del teléfono de "kufa" (como le decían sus amigos) quedó en una antena cercana a Bahía Blanca.
El 5 de junio Cristina Castro denuncia formalmente la desaparición de su hijo. La causa queda a cargo del titular de la UFI N°20 de Bahía Blanca, Rodolfo De Lucía.
Diez días más tarde, el 15 de junio, el policía Alberto González declaró que demoró a Facundo en el kilómetro 750 y que le sacó una foto a su registro de conducir. Aquí comienzan las contradicciones: primero aseguró que Facundo siguió a pie, pero después dijo que el joven subió a un auto.
La agente Xiomara Ayelen Flores aseguró que el 19 de junio llevó a Facundo desde Mayor Buratovich hasta Teniente Origone (por protocolo tendría que haberlo llevado nuevamente a su casa), aunque Cristina Castro se entera de esto casi dos meses después.
La familia del joven continúa con su búsqueda y, el 31 de julio, se encuentra una especie de amuleto que Facundo llevaba siempre consigo (se lo regaló su abuela) en un allanamiento en la delegación policial de Teniente Origone, en una bolsa de basura en un calabozo.
Días después se encuentran conversaciones entre policías investigados en las que se refieren a Facundo e imágenes del DNI de él en el celular de una agente.
El 16 de agosto se encontró un cuerpo esqueletizado en un cangrejal de la zona de Villarino Viejo. Cristina Castro viaja al lugar y encuentra una zapatilla en los alrededores, muy parecida a las que llevaba su hijo el día que se fue de su casa.
El 22 de agosto comenzó la autopsia en manos del Equipo Argentino de Antropología Forense, quien busca identificar el cuerpo y establecer las posibles causas de la muerte.
Luego de 12 días, el 2 de septiembre, se confirma que los restos encontrados en el cangrejal pertenecen a Facundo Astudillo Castro.
La familia del joven, encabezada por Cristina, asegura que Facundo fue víctima de una desaparición forzada y que hay oficiales de la Policía Bonaerense involucrados. Aún no hay detenidos.