A 16 años de la 'gallinita' de Tevez en el Monumental

El 17 de junio de 2004, Boca escribió una de las páginas más doradas de su rica historia. El conjunto dirigido por Carlos Bianchi se plantó en el Monumental, supo aguantar hasta con un jugador menos y terminó eliminando a River de la Copa Libertadores de América.

Aquella noche pasó de todo: pierna fuerte, expulsiones, goles agónicos, definición por penales y un silencio que todavía puede escucharse. La suerte, algo fundamental en el fútbol, jugó a favor para el cuadro de la Ribera que terminó avanzando hacia una nueva final continental.

La estrategia del Virrey, el oportunismo de Carlitos, la frialdad de los pibes para patear, la atajada de Abbondanzieri y la mística copera del Xeneize hicieron que la mitad más uno de la Argentina festeje una nueva hazaña frente al eterno rival.

Reviví la serie de penales y, si sos bostero, emocionate una vez más: