Falleció Amadeo Carrizo
Gloria y presidente honorario de River, fue un emblema del arco durante las décadas del '40, '50 y '60. El 12 de junio, fecha de su nacimiento, fue decretado "Día del Arquero".
No es un día más para el deporte argentino. Hoy se despide a uno de los grandes, de los que marcaron la historia, quedarán en el recuerdo de varias generaciones y se convertirán en mito para las que vendrán. Amadeo Raúl Carrizo falleció a los 93 años y dejó escritas muchas páginas doradas del fútbol nacional.
El hombre que nació en Rufino, Provincia de Santa Fe, el 12 de junio de 1926, hizo casi toda su carrera en River desde que debutó en 1945, con apenas 19 años. En el club de sus amores atajó en 520 encuentros y ganó siete títulos de Primera División, una Copa Ibarguren y dos Copas Aldao.
Su legado, sin embargo, trasciende su palmarés. Dicen aquellos que peinan canas que el gran valor del guardavalla que se retiró en Millonarios de Bogotá fue haber "reinventado el puesto", apelando por primera vez a un estilo más técnico y con protagonismo incluso fuera de su área.
Amadeo tuvo también un paso por la Selección, con 19 presentaciones, pero marcado por la eliminación con goleada en el Mundial de Suecia 1958. Su revancha llegó en 1964, cuando consiguió la Copa de las Naciones.
En Núñez, Carrizo es un ídolo indiscutido, a punto tal que desde 2013 era el Presidente Honorario del Millonario, nombrado por la Comisión Directiva que encabeza Rodolfo D'Onofrio. A su vez, el día de su nacimiento fue decretado como "Día del Arquero" en la República Argentina.
Con él se van miles de anécdotas, de triunfos y derrotas, de alegrías y frustraciones, y sobre todo un valor que pocos consiguen: el respeto y el afecto de todo el fútbol argentino.