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LANÚS 0-1 BANFIELD

Banfield frenó a Lanús y festejó en el Clásico del Sur

Banfield le ganó hoy 1-0 a Lanús, en La Fortaleza, y festejó en una nueva edición del Clásico del Sur, en el marco de la decimotercera fecha de la Superliga.

Banfield frenó a Lanús y festejó en el Clásico del Sur

El gol de la victoria del Taladro lo anotó el delantero Julián Carranza, en la etapa complementaria, y le permitió al equipo de Julio César Falcioni tomar aire en la lucha por la permanencia.

El Granate, que llegaba a este partido como líder, fue un conjunto deslucido que estuvo lejos del nivel mostrado en las últimas presentaciones.

No consiguieron sorprender ni quebrar líneas en un primer tiempo luchado y parejo. Quedó mejor parado Banfield porque supo impedir que Lanús armase su juego. Con inteligencia táctica, el equipo de Falcioni le quitó espacios al dueño de casa y aquietó el ritmo.

Además, Banfield elaboró la única chance clara del primer período. Una buena proyección de Luciano Gómez, por derecha, siguió con el pase en puñalada a Julián Carranza, quien punteo la pelota en el área y pegó en el poste, a los 34 minutos.

Apenas otros dos intentos, seguidos y casi calcados, habían ocurrido antes. A los 19 minutos Sergio Vittor probó de afuera y su tiro salió encima del travesaño.

Y a los 21, Pepe Sand remató de afuera y su derechazo también se perdió arriba del travesaño.

A los 6 minutos del segundo tiempo, otra lúcida trepada de Claudio Gómez por el andariego derecho desembocó en otro centro perfecto al área. Lo bajó Jesús Dato lo de cabeza y Julián Carranza le ganó la posición a Lautaro Valenti y cayéndose metió el derechazo goleador.

Cinco minutos después Renato Civelli le pegó un codazo a Lautaro Acosta y fue expulsado.

El gol y la tarjeta roja influyeron en lo que faltaba del partido. Lógica pura: se desdibujo más un desdibujado Lanus y fue más cauteloso y medido un cauto y táctico Banfield. Resignó posesión y terreno el Taladro, con solvencia e inteligencia y sin ofrecer resquicios.

Lanús se sentía incomodo, por méritos del rival y por falta de chispa propia.

Nunca encendió su juego como para amenazar ni siquiera con el empate. Algo inquietó el ingresado De la Vega. Pero, no tuvo acompañamiento y esta vez (a diferencia de su gol agónico ante Huracan la fecha pasada ) falló en la definición, a los 42 minutos erró una chance increíble.

Los clásicos, suele repetirse, son partidos aparte. Y se cumplió nuevamente: el Banfield que venía golpeado y con cinco fechas sin ganar fue más que el Lanús que llegaba puntero y con una racha de diez partidos invicto.