Riquelme y las elecciones en Boca: todos lo quieren, él espera

"Para poder anunciar la fecha del partido, me tuve que comunicar con todos los candidatos. Yo no sé quién va a ganar las elecciones pero tengo que agradecer que me dieron permiso para poder utilizar la cancha. Es real que todos quieren que los acompañe, pero tengo que pensar las cosas muchísimo. Puede ser que le de una respuesta a alguno, como puede ser que no". Eso mismo dijo Juan Román Riquelme, en diálogo con TNT Sports, el día que confirmó su despedida en una conferencia organizada en Don Torcuato.

El contenido de la frase es simple, sencillo y fácil de entender. Cuenta con el tono y el respeto de siempre por parte del máximo ídolo de Boca sobre los personajes políticos que conviven en un año más que caliente para el elenco de la Ribera. A casi un mes de los comicios, la interna está al rojo vivo y las diferentes operaciones mediáticas mueven la agenda periodística de un lado al otro.

Hace algunos días, Olé dio a conocer una noticia en la que afirmó que Román caminaría junto a Christian Gribaudo en la elección para ocupar el puesto de Vicepresidente 2° de la institución. La bomba rebotó por todos lados pero el propio Daniel Angelici, actual presidente, fue el encargado de desmentirla: "Solo hablamos de su partido homenaje, nunca de política".

Pero con el oficialismo no es el único lugar a donde se lo vinculó a Román. Diario Crónica, el pasado 24 de octubre, se encargó de informar que el Diez tendría una reunión con Jorge Amor Ameal para acordar su vínculo y unirse a uno de los sectores de la oposición. ¿El hipotético rol? Siempre ligado al fútbol.

José Beraldi y Royco Ferrari tratan de marcar la diferencia y afirman que "no usarán a Riquelme como bandera política". Pero el propio titular de la fórmula también soltó en una charla con As que habló con Juan Román hace algunos meses y le manifestó su deseo de que se sume al grupo de trabajo.

Pero para saber de qué lado estará Riquelme en los comicios, hay que esperar su palabra. Desde su entorno mantienen la calma, no comunican nada y, a diferencia de otros sectores, priorizan no confundir al hincha con ninguna falsa alarma. Como en la cancha, la pelota está en los pies de Juan Román, un tipo que siempre pensó antes de ejecutar.