Los refuerzos encajan en River

Uno de los deberes que tiene Marcelo Gallardo este semestre es mantener viva la llama competitiva de River Plate. Para conseguirlo, era muy importante hacer refuerzos que mantuviesen la competitividad y tapasen los huecos que dejaron los futbolistas que se marcharon.

Además de cerrar la compra de Juan Fernando Quintero con su posterior renovación, Enzo Francescoli y el 'Muñeco' decidieron firmar a Matías Suárez para la ofensiva, un delantero con el que poder dar descanso a Lucas Pratto y Santos Borré y fuese una alternativa a Ignacio Scocco, a quien no le están respetando las lesiones. Suárez, además de experiencia europea, conoce a la perfección la Superliga, torneo en el que va a gozar de mayor protagonismo.

Tapar el hueco que dejó Jonathan Maidana era el otro reto para el mercado de fichajes. Sabiendo que era imposible sustituir a una leyenda como Jony y analizando con la evolución de Martínez Quarta, se decidió traer a un central joven con proyección. Robert Rojas fue el elegido, valorando su importancia en Guaraní con solo 22 años y su crecimiento los últimos años.

Tanto Suárez como Rojas se han adaptado al sistema de Gallardo a la perfección, algo que no es sencillo. Jugadores como Juanfer Quintero, Bruno Zuculini o Luciano Lollo tuvieron una larga etapa de acondicionamiento antes de ser importantes en la rotación del técnico. Ambos han gozado de minutos en este arranque de semestre, estableciéndose como alternativas tanto en las alineaciones titulares como desde el banquillo.

Sin embargo, gozan de papeles distintos. Mientras que el delantero es un comodín para el 'Muñeco', Rojas se ha convertido en prácticamente un indiscutible, especialmente cuando se ha jugado con defensa de tres centrales. Suárez actúa como primer recambio en el ataque, y será más importante con el comienzo de la Copa Libertadores a la hora de dar descanso a los titulares en el torneo local. Lo que es evidente es que los dos nuevos refuerzos cuentan con toda la confianza de su técnico y se han puesto lo más rápido posible a la altura de los demás.