El paso lógico de Alfaro

Gustavo Alfaro se convertirá en el director técnico de Boca Juniors a partir de 2019. El ex de Huracán será el primer técnico de Nicolás Burdisso como director deportivo y el último (con casi toda seguridad) del mandato de Daniel Angelici como presidente de Boca. Su llegada ha generado mucha controversia en el mundo del fútbol en Argentina debido a que le restaban seis meses de contrato con el club 'quemero'.

En Argentina se tiene a criticar mucho las decisiones de terceros, y cuando esto incluye a Boca, se potencia la crítica. Gustavo Alfaro da un paso lógico en su carrera: dirigir a uno de los clubes más importantes del mundo en un momento clave de su carrera.

Alfaro pasó por muchos equipos en Argentina: Atlético Rafaela, Patronato, Quilmes, Belgrano, Olimpo, San Lorenzo, Arsenal, Rosario Central, Arsenal, Tigre, Gimnasia (LP) y Huracán, además de la experiencia en Arabia Saudita. Un técnico con mucha experiencia en equipos de media tabla o modestos, pero que supo sacar campeón a clubes como Arsenal. Su paso en un grande como San Lorenzo no fue fructífero, pero ahora le llega la revancha.

Trabajador, humilde, con una idea clara de juego y pragmático. Alfaro llega a Boca en la oportunidad de su vida. Llegar a lo máximo como director técnico en Argentina (selección aparte) es esto, por lo que rechazar esa oportunidad no estaba concebido por el ex Huracán.

Es cierto que él mismo dijo que no quería irse de Huracán varios meses antes, pero las cosas cambian. Boca ya no tenía técnico y él tenía que tomar una decisión. Los contratos están para cumplirlos pero también se pueden romper en situaciones diversas. Las negociaciones siempre existen y cuando a alguien le llega una oportunidad de dar un paso, tanto en la parte económica como de prestigio en su carrera, la tiene que dar. Alfaro actuó como hubiéramos actuado todos.