Carrillo: "Madrid vivirá un clima lindo con la final River-Boca"

La vuelta de la final de la Copa Libertadores se va a jugar en Madrid. El Santiago Bernabéu será el escenario de un partido teñido de vergüenza tras los incidentes “lamentables” en los alrededores del Monumental. Las comillas las pone Guido Carrillo, delantero del Leganés y ex de Mónaco o Estudiantes de la Plata. El ariete vivirá de cerca un evento que tendrá un “clima lindo” por la gran presencia de argentinos en la capital de España, pero que se sustenta en un origen preocupante para este emigrante del balón albiceleste.

Pese a la distancia, el de Magdalena ha vivido de cerca lo sucedido estos días en Buenos Aires. Leo Jara, uno de los hombres de Boca herido en el asalto al bus xeneize, es amigo íntimo. “He hablado mucho con él estos días”, explica Guido en un acto de LaLiga en el que ariete pone verbo a la frustración que le provoca, como argentino, lo sucedido en estos días de ira y furia. De tristeza y pesar.

“Hay que mejorar la educación [de Argentina], no poner parches, seguir poniendo parches y dejar que continue el juego. Todo esto me da mucha bronca”, comenta con el tono crispado, timbre de voz poco habitual en él que contrasta con su personalidad melosa. Tanto bochorno saca de su interior una frustración desconocida.

“Causa mucho dolor ver esas cosas. Que sean agredidos los futbolistas, las imágenes de violencia… pero creo que es un problema social que tiene Argentina y Sudamérica”, continúa argumentando el delantero del Leganés. “Es mucho más profundo que la rivalidad entre dos hinchadas. Parte de la educación de la gente. Pasa en el fútbol, en un semáforo… en todos lados. Hay que mejorar eso, la educación”, añade con la mirada perdida, evocando su país en una lejanía que ahora mutará en lo contrario. En vecindad.

“El Bernabéu es una cancha emblemática”

La final le pillará a 20 minutos en tren de su lugar de trabajo. Un lujo. Como el escenario escogido para jugar. “El Bernabéu es una cancha emblemática. Tiene una historia y una infraestructura enorme. Madrid es el lugar con más argentinos en Europa. Eso va a generar un clima lindo. Para todos los que puedan disfrutar de un partido así es muy bonito”, reflexionó sacudiéndose el mal sabor de boca por tanta crispación.

Pese a ello, Carrillo admite que es cualquier cosa menos normal. “Es raro. Es todo raro lo que pasó, lo que viene pasando. Para mí, bienvenido sea. No jugamos ese día, así que voy a ir a verlo con Jonathan Silva [compañero suyo en el Leganés], que también jugó en Boca”, concluye sus pensamientos con esa mezcla de rabia por lo sucedido y felicidad porque la fortuna le va a permitir vivir de cerca un acontecimiento histórico. Aunque su origen sea un fiasco “lamentable”.