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PALMEIRAS - BOCA

Las 5 claves del pase de Boca

Boca llegó a la final de la Copa Libertadores después de empatar en el Allianz Parque contra Palmeiras en un partido muy inteligente del Xeneize.

Actualizado a
Las 5 claves del pase de Boca
Fernando BizerraEFE

El planteo de Guillermo

Guillermo Barros Schelotto aprendió de los golpes recibidos y de los errores del pasado, demostrando ayer que Boca está sabiendo cómo jugar estos partidos y los momentos más complicados. Repitió la fórmula del partido contra Cruzeiro de visitante pero con Wanchope Ábila de punta, que le da una posibilidad más al equipo.

Los cambios de Gustavo

Con la suspensión de Guillermo, le tocaba a Gustavo dirigir el partido desde el banco de suplentes. el Mellizo y cumplió a la perfección. Cuando Boca sufría, en vez de meterse atrás decidió dar entrada a Benedetto, que con más movilidad, terminó de volver loco a los defensores de Palmeiras, que estaban cansados. Después, la entrada de Gago terminó de matar a los brasileros, que no podían controlar la pelota en el medio de la cancha.

La tranquilidad de Rossi

Nobleza obliga, el siempre criticado arquero de Boca, jugó una buena serie. Atajó varias pelotas importantes y de gran dificultad, dudó en algunos centros como siempre, pero siempre mostró tranquilidad, algo que sus compañeros siempre agradecen. El arquero de Boca mostró en esta serie que, a pesar de todo, tuvo responsabilidad positiva.

El temple del equipo

Como dijo Scolari en conferencia de prensa, Boca jugó como un equipo experimentado, que sabe jugar partidos definitorios, que no se pone nervioso. Barrios y Nández en el medio se dedicaron a cortar el partido en el momento indicado, Pablo Pérez jugó uno de sus mejores partidos con la camiseta de Boca, Wanchope aguantó la pelota todo lo que pudo y más. Boca tiene que mostrar esta tranquilidad en la final.

La potencia ofensiva del equipo

Benedetto y Wanchope Ábila. Los dos nueves del equipo están bien, puede jugar cualquiera, pero en este equipo los esfuerzos hay que repartirlos. Villa y Pavón por los costados, siempre picantes y punzantes, Zárate cuando entra desde el banco, que pese a no estar en su mejor momento, siempre es peligroso. Y todo, sin contar a Tevez. El poderío ofensivo de Boca es importante y tiene que ser el mayor arma de cara a la final.