Diego Schwartzman, el número uno del equipo de Copa Davis de la Argentina, fue autocrítico y confesó hoy que le costó adaptarse al partido que finalmente le ganó al chileno Christian Garín en tres sets y luego de sufrir más de lo previsto."Me costó adaptarme al partido. Él estuvo más suelto y le gané porque sabía que no iba a poder mantener esa intensidad hasta el final, eso fue lo que me permitió quedarme con la victoria", analizó el "Peque", en la rueda de prensa que ofreció luego de haberle dado la igualdad a la Argentina en el estadio Aldo Cantoni, de San Juan. Schwartzman, campeón este año del ATP 500 de Río de Janeiro y 15to. en el ranking mundial, superó a Garín (217) por 7-6 (7-2), 6-7 (2-7) y 6-2 luego de un extenso partido que duró dos horas y 45 minutos, y en el que desperdició seis 'match points' para recién definirlo en el séptimo. "Tenía que haberlo definido antes pero me confié demasiado y Garín lo aprovechó, eso es algo que debo corregir", admitió el tenista nacido hace 25 años y surgido del Club Náutico Hacoaj. Schwartzman se quejó del público chileno que lo hostigó durante su partido ante Garín, al punto que debió intervenir el árbitro para calmarlos. La situación cobró su momento más tenso cuando un grupo de chilenos ubicados en la platea norte explotaba globos cada vez que Schwartzman se disponía a sacar, eso generó las quejas del capitán Daniel Orsanic y hasta la intervención del árbitro para llamarles la atención. La situación se calmó cuando los hinchas trasandinos arrojaron los globos blancos, rojos y azules a los argentinos, lo que generó aplausos de los cuatro costados y se puso fin al conflicto. "Se generó un clima que no estuvo bueno. Me molestaron con eso de los globos y me faltaron el respeto cuando había uno que me insultaba permanentemente , creo que el árbitro debió haberlo advertido o sacarlo del estadio", comentó por último Schwartzman.