Alianza gana el Clásico peruano antes de recibir a Boca

Alianza Lima, sin gustar, ni convencer, hizo suyo el clásico ante un rival animado pero limitado. Tras ello, uno pelea arriba y el otro sufre abajo. Poco habitual entre clásicos rivales.

El primer tiempo ofreció un trámite sorpresivo. Hizo recordar el primer clásico que afrontó Troglio dirigiendo a la U; cuando, por intensidad, presión y cambio de ritmo, superó claramente a Alianza y lo goleó 3-0.

Esta vez, de manera similar, los cremas, de la mano de Siucho y Quintero por bandas y poniendo en evidencia las flaquezas de Alianza en sus laterales, sorprendieron en intención, actitud y determinación y encontraron frutos luego de un preciso centro de Quintero -marcado muy de lejos por Duclós- que conectó el promovido Osorio para hacer justicia en el marcador. La U era superior a un Alianza sin chispa, lento, errático y sin profundidad. Aún así, quizás por el entusiasmo del momento, los cremas se desequilibraron y en una contra, Alianza tomó mal acomodada a la defensa crema, Quevedo hizo flecos a Schuler y sirvió un excelente centro pasado que le permitió a Hohberg llegar solo por detrás de todos y conectar también de cabeza y al primer palo, el 1-1.

El segundo tiempo empezó de forma parecida, con la diferencia de que la U se fue diluyendo en la medida en que se le fue acabando el oxígeno y Alianza creció con los ingresos de Costa y Pósito aunque igual no convenció. El triunfo llegó por mérito del desequilibrio de Hohberg que con su habilidad provocó la torpeza del penal cometido por Schuler y que Cruzado convirtió en el 1-2. Y si algo faltaba para coronar el infortunio crema, la porfía de Pósito provocó una descoordinación entre Balbín y Fernández y el recién ingresado terminó del firmar el 1-3.

Como lo calculamos: lo mejor que podía aportar la U era motivación y entusiasmo pero la dependencia que tiene de Quintero y Siucho y su falta de consistencia y equilibrio, le facilitó la tarea a un elenco íntimo que llegaba como favorito y que aún con la victoria, ofreció fragilidades defensivas que deberá resolver para el duelo ante Boca. Por el lado de los cremas, el último lugar de su grupo en la Copa de Verano habla de su doloroso presente. Dolor de cabeza crónico para Troglio.