PORTUGAL
Battaglia: "Mi psicólogo me dijo que estaba loco"
El mediocentro argentino habló en Récord sobre sus primeros meses como jugador del Sporting de Portugal junto a Jorge Jesús y su difícil etapa en la adolescencia.
Rodrigo Battaglia repasó sus primeros meses como futbolista del Sporting de Portugal en una entrevista para ‘Récord’, en donde reconoció la importancia del técnico Jorge Jesús para acabar en las filas del conjunto lisboeta.
"Después del Sporting de Braga-Sporting, que perdimos 3-2, con un hat-trick de Dost, me comunicaron que el mister estaría interesado. Pero ya se sabe cómo es el fútbol, del interés a la realidad hay 20 pasos que no dependen sólo de mí. A falta de cinco o seis partidos, seguí haciendo mi trabajo con el Braga. Cuando fui de vacaciones a Argentina, supe de nuevo que había un interés real. Ahí hablé con mi agente para tratar el fichaje”, dijo.
Battaglia reconoció que desde que está en el Sporting “se siente más futbolista” y eso lo achaca a la ayuda que le proporciona Jorge Jesús: “Presta mucha atención a los detalles”.
"Cada uno vive el fútbol a su manera: él como entrenador y yo como jugador. Pero presta mucha atención a los detalles. Soy más jugador desde que llegué al Sporting. El míster, un grande tanto en Portugal como en el mundo, y mis compañeros tienen un papel importante en esto”, dijo.
Sobre su posición en el terreno de juego, habiendo jugado como mediapunta y volante, Battaglia afirmó que en este momento de su carrera se considera más como un mediocentro defensivo: "Actualmente, me veo más como un medio defensivo, porque jugué más partidos ahí desde el inicio de la temporada. En el futuro no sé, el entrenador es el que decide. Intento hacer todo lo que pide y voy a seguir trabajando para responder a sus exigencias", continuó.
Battaglia también tuvo un hueco para hablar de sus comienzos como jugador, en el que tuvo problemas de crecimiento y falta de confianza que le llevaron a acudir al psicólogo: "Fue difícil y tuve que recurrir a un psicólogo. Me dijo que era demasiado autocrítico. Por ejemplo, antes de ir a entrenar, iba al jardín de mi casa y ponía una botella en el césped. Tenía cinco remates para derribar la botella, si acertaba tres, entrenaba bien. Se lo conté al psicólogo y su respuesta era que yo estaba loco (cuenta entre risas). Me dijo que me debía relajar porque era demasiado exigente", finalizó el argentino.