Los latinoamericanos que se hicieron con el Golden Boy
Kylian Mbappé se llevó el galardón como mejor futbolista Sub-21 del mundo con 291 votos sobre 300. Repasamos qué jugadores sudamericanos lo lograron.
Kylian Mbappé se hizo con el 'Golden Boy' como mejor jugador menor de 21 años del mundo con solvencia. El delantero francés, por el que el PSG deberá pagar al Mónaco 180 millones de euros tras su año de cesión, arrasó en las votaciones logrando 291 de los 300 votos emitidos y muchos les señalan como uno de los jugadores que recogerá el testigo de Messi y Cristiano en lo más alto del fútbol mundial.
Pero Mbappé ha sido el último de una larga lista que, con más o menos suerte después, se llevaron el galardón que la FIFA entrega desde el año 2003. Rooney, Cesc Fábregas, Gotze, Isco, Pogba...han sido alguno de los ganadores pero analizamos los cuatro sudamericanos que consiguieron su 'Golden Boy'.
Leo Messi, año 2005
El rosarino empezaba a dar una pequeña muestra de lo que se avecinaba pero pocos podían intuir que se convertiría en uno de los mejores de la historia, si no el mejor. En su primera campaña en el Barça (2004/05), aún con ficha de canterano y el '30' a la espalda, Messi ganó la Liga con Fran Rijkaard en el banquillo.
Kun Agüero, 2007
El, por entonces, imberbe jugador argentino vivía a la sombra de Torres tras completar su primera temporada pero ya dejaba detalles que le auguraban un futuro más que prometedor. Ese verano fue además pieza clave para hacer a Argentina campeona del Mundial Sub-20. Con la salida del '9' rojiblanco y la llegada de Forlán, el Kun acabó de explotar.
Anderson, 2008
El brasileño es el claro ejemplo de un jugador prometedor que no acaba de triunfar. Tras destacar en el Oporto, el United le fichó por 30 millones pero nunca acabó de hacerse un fijo con los 'red devils' aunque formó parte del equipo que ganó la Champions League en su primera campaña en Manchester.
Alexandre Pato, 2009
Después de que el Milan desembolsara 22 millones por él con apenas 17 años, el delantero brasileño maravilló en el conjunto rossonero durante sus dos primeras temporadas. También venía de formar parte de la canarinha que se hizo con la Copa Confederaciones de 2009. Su carrera fue de más a menos y se fue desinflando hasta acabar en la liga china.