Argentina sufrió pero sumó su segundo triunfo del Americup

El seleccionado argentino de básquetbol exhibió autoridad y carácter para remontar una desventaja de 10 tantos, en el triunfo que obtuvo sobre su par de Canadá, por 92-86, en tiempo suplementario, por la segunda fecha del grupo B de la Copa América (AmeriCup), con sede en la ciudad de Bahía Blanca.
El conjunto dirigido por Sergio Hernández contó con una superlativa labor del base cordobés Facundo Campazzo, decisivo en el tramo final del juego en el Osvaldo Casanova.
El jugador del Real Madrid culminó con una planilla de 23 puntos (2-6 en dobles, 4-8 en triples, 7-8 en libres), 6 asistencias, 2 rebotes y 2 robos.
También hubo muy buenas prestaciones de dos de las jóvenes promesas, que pronto asomarán como realidad. Así, el alero marplatense Patricio Garino terminó con 20 tantos (5-7 en dobles, 2-6 en triples, 4-5 en libres) y 3 asistencias; mientras que el ala pivote santiagueño Gabriel Deck aportó 20 unidades (8-11 en dobles, 0-1 en triples, 4-7 en libres) y 9 rebotes.
El goleador de la noche estuvo del lado visitante, ya que el base Brady Heslip cerró su tarea con 24 puntos (3-6 en triples).
Argentina, que ya tiene asegurado su lugar en el Final Four de Córdoba por país organizador, cerrará mañana su participación en la fase de grupos, enfrentándose a Islas Vírgenes, a partir de las 22.00. Canadá, por su lado, se medirá a primera hora con Venezuela (19.30)
El primer cuarto entregó una muy buena cara del equipo de Hernández. Sobre todo cuando la bola pasó por las manos de Campazzo hacia el siempre confiable Deck y cuando Garino (pudo correr la cancha) hizo gala de su potencia para penetrar al canasto adversario.
Con un combinado canadiense que no estuvo afinado en la defensa, Argentina propuso y concretó. El marplatense Garino fue la bandera (9 puntos, 2 asistencias, un robo) y el equipo albiceleste se fue al primer descanso con ventaja de 9 (25-16)
En el segundo capítulo, un encendido Redivo, que encestó 14 puntos en menos de 5 minutos (4-5 en triples), le permitió al elenco argentino tomar una distancia de 14 (39-25), al promediar el cuarto.
Sin embargo, Argentina empezó a confundir los caminos, apuró las ofensivas y pasó más de cinco minutos sin marcar. Los canadienses se animaron en el 'uno contra uno', apostaron a la fortaleza en el juego interno del ala pivote NBA Andrew Nicholson (9 tantos) y metieron un parcial 15-0, para adelantarse a 10s., del cierre, por un impensado 42-40.
En la última maniobra del segmento, Argentina movió bien la pelota y liberó la zona para el disparo externo de Redivo, que completó un muy buen parcial (17 tantos) con una conversión que devolvió la diferencia al combinado local: 42-40.
El tercer parcial entregó un golpe de escena insólito, casi de inmediato. El capitán y emblema, Luis Scola, ingresó al rectángulo apenas 9 días después de confirmarse su desgarro en el gemelo izquierdo.
El ala pivote y máximo goleador histórico del seleccionado argentino probó, tomó un rebote y cometió una infracción, aunque sintió molestias en el gemelo de la otra pierna. Duró solamente 1m. 37s., en cancha y fue sustituido por Marcos Delía.
Esa situación incomodó a un equipo que perdió frescura, se complicó en el traslado y empezó a perder eficacia en la defensa. Entonces, la mano siempre fiable de Heslip y la potencia en los tableros de Nicholson (15 rebotes) le dio al visitante la chance de adelantarse en la pizarra: 53-55
En el período final, Canadá amenazó con encarrilar la historia y tomó ventaja de 69-59, cuando quedaban algo menos de 5 minutos.
Entonces se vino la reacción argentina encabezada por un activo Campazzo, que aportó en todos los rubros, y por Garino, que rindió en los dos costados de la cancha.
Así, el equipo de Hernández recortó diferencias y logró nivelar la historia, a casi 3 segundos del final, con un doble de Javier Saiz. El partido fue a tiempo suplementario.
En la prórroga, el cordobés del Real Madrid exhibió sus credenciales y anotó un triple que sentenció la historia, a apenas 7s. 6/10 para el cierre. El delirio se apoderó del Casanova, que disfrutó con una victoria reconfortante.