¿Qué deben hacer los Cavs? 5 claves para parar a los Warriors

Otro año más, los Warriors y los Cavaliers vuelven a protagonizar la batalla por el anillo. Tras conseguir hace doce meses el primer título de su historia, Cleveland tratará a partir de esta madrugada (03:00, hora peninsular española) repetir corona y evitar así la revancha de los de Oakland. De conseguirlo, se convertirán en el primer equipo campeón que revalida su condición desde los Heat 2012 y 2013. O lo que es lo mismo, sería el segundo back to back y cuarto campeonato para LeBron James. ¿Qué tienen que hacer los Cavs para ganar? Lo repasamos en cinco puntos claves.

1. LeBron James y Kyrie Irving

Como ya sucediera en 2016, toda opción de los de Lue pasa por contar con la mejor versión de sus dos superestrellas. Tal y como ya nos tiene acostumbrados, LeBron James llevará el peso de su equipo desde el salto inicial. Anotará, reboteará, dirigirá el juego de su equipo, se vaciará en defensa y promediará unos números más propios de un superhéroe. Contamos con todo ello de antemano… aunque necesitará que el físico le respete (es de suprema importancia que alguien asume los mandos en los escasos minutos que descanse). Será entonces cuando Kyrie Irving deba dar un paso al frente —extrañaría ver a ambos en el banquillo al mismo tiempo—. El base está llamado a exhibir su versión asesina de los tres últimos partidos de las pasadas Finales, la del último cuarto del penúltimo duelo en la Navidad 2016 o la que enterró a los Celtics en la cuarto encuentro hace una semana. Un talento sublime que necesita estar enchufado los 48 minutos tanto en ataque como, pese a no ser su punto fuerte, en defensa. Si LeBron e Irving se sienten cómodos, las acciones de Cleveland se dispararán.

2. El rebote

Si esta versión demoledora de los Warriors ha mostrado algún talón de Aquiles a lo largo de la temporada ese es el rebote. Cargarlo en ataque no está entre sus mayores virtudes y en defensa han concedido más segundas opciones que cualquier otro equipo en Temporada Regular. En los playoffs han mejorado bajo el aro, pero siguen mostrando unas carencias que Cleveland necesita explotar al máximo. Para ello cuentan con Tristan Thompson. Por ello, el canadiense se antoja aún más fundamental que en las dos anteriores series por el título. Además de él, Kevin Love y LeBron James tratarán de limitar al máximo los regalos extras en defensa. Si a un equipo como Golden State le permite segunda o terceras opciones estás…

3. Dominar el ritmo

Tan fácil de decir como complicado de lograr. Pero ante un grupo capaz de superar holgadamente los 110 puntos por cada 100 posesiones (un dato que también acostumbran a dejar pequeño por cada 48 minutos), es obligado tratar de obstaculizar sus automatismos en la mayor medida posible. En 2015 y 2016 los Cavs consiguieron que Curry rindiese por debajo del nivel mostrado en ambas temporadas, pero este año no les bastará con eso: Kevin Durant supone una amenaza igual o mayor. Lue tiene que sacar a relucir su pizarra para no permitir tiros liberados y cómodos de su rival y, sobre todo, impedir que los Warriors encuentren ventajas cómodas a partir del pick&roll. Una misión tan complicada que requerirá una concentración al 100% por parte de cada hombre de los Cavs. Y ya se sabe, cada vez que el rival falle un tiro toca asegurar el rebote. Y a partir de ahí crear. Algo que Kevin Love hace a las mil maravillas, según captura el balón mira muy bien hacia el campo contrario para tratar de conseguir puntos extra al contraataque. Sus pases con escuadra y cartabón desde debajo de su propio aro para LeBron son ya un clásico moderno.

4. Acierto exterior

Más allá de LeBron e Irving, la mejor arma de Cleveland son los triples. Hace un par de años costaría haberlo dicho, pero a día de hoy suman más puntos desde la línea de tres que los Warriors. Kevin Love, J.R. Smith, Kyle Korver, Iman Shumpert, Channing Frye y los propios LeBron e Irving son especialistas. Tener afinadas sus respectivas muñecas no solo les proporciona un buen saco de tantos, sino que permite ensanchar el campo. Una cuestión fundamental para su planteamiento ofensivo al complicar la labor defensiva del rival. Si consiguen abrir la defensa de los Warriors, una de las mejores de la historia, LeBron e Irving tendrán más fácil el romper a su par para penetrar hacia el aro.

5. Frenar a Draymond Green

No es casualidad que la histórica remontada de hace un año coincidiera con la sanción a Draymond Green. Defensivamente el ala-pívot es el cemento que une a los de La Bahía. Defiende por igual a un 2,15 que a un alero o escolta. Puede cambiar en los bloqueos con cualquiera. Y en ataque, su entendimiento del juego y capacidad para jugar por fuera y al poste le convierten en un hombre igual de importante que los Curry, Durant y Klay. Love. Sus innatas condiciones le convierten un doble dolor de cabeza. Emparejarle con Love y Thompson podría suponer una sangría, pero si LeBron se convierte en su defensor primario, ¿quién hace frente a Durant? El factor Draymond dota a los Warriors de una versatilidad nunca antes vista. Conseguir secarle acercaría el anillo a Ohio. Y ese el gran objetivo de LeBron James y compañía.

Narración del Warriors vs Cavaliers , Final de la NBA Game 1