ARGENTINA
Alberto Fernández: “No sé por qué no vinieron a la Casa Rosada”
El presidente de Argentina se refirió a los multitudinarios festejos que recibió la Albiceleste a su vuelta al país. No quiso responder a los comentarios de ‘Chiqui’ Tapia.
La fiesta que vivió Argentina con motivo de la celebración de la consecución de la tercera Copa del Mundo ha dado la vuelta al mundo. Casi el 10% de la población del país se concentró en los alrededores de la capital, colapsando a la caravana que llevaba a los campeones del mundo en la autopista Ricchieri. Los jugadores y el cuerpo técnico tuvieron que ser trasladados en helicóptero a Ezeiza, no pudiendo terminar el ansiado pasacalles con la afición congregada por la ciudad. A esta situación se refirió Alberto Fernández, presidente de la República.
“Todo transcurrió en orden y con alegría, pero en un momento la caravana no pudo seguir por cantidad de gente. Seguro el presidente de la AFA quería que sea más extenso, pero era muy difícil en las condiciones que había ayer en Buenos Aires y Gran Buenos Aires. No califico, ni descalifico a nadie”, comenzaba explicando el presidente del país sudamericano. “Si no llegaron a la Autopista 25 de Mayo para saludar a la gente en la 9 de Julio, puede ser una frustración de la AFA”.
La duda de qué camino iba a recorrer el micro que transportaba a los jugadores fue engrandeciéndose a medida avanzaba la tarde. La mala planificación del recorrido fue tendencia en las redes sociales. Mientras que muchos especulaban con la posibilidad de trasladar al plantel a la Casa Rosada, caso que finalmente no se dio, Alberto Fernández aludiría que “no sabía” el por qué de esa decisión. “No sé la causa por la que no vinieron, me dijeron que fue por que no podían llegar. Sí es cierto que soy el único presidente que no recibió a un equipo campeón del mundo, pero soy el único que ganó la Copa América, la Copa con Italia y la del Mundo”, diría el presidente.
Desde que asumiera el cargo hace ya tres años, Alberto Fernández fue tajante con la política de no mezclar el deporte con la política. Su no presencia en la final fue clara prueba de ello, mientras que su homólogo francés fue parte ‘clave’ de la concentración gala. “Es parte de la decisión que siempre tomé de no mezclar la política con el fútbol, porque cada vez que se metió, arruinó al fútbol. Siempre dije que no y no creo que esa política haya sido tan mala”, diría el mandatario.
“No hablé con el técnico, ni nadie. El Papu Gómez escribió un mensaje muy cariñoso en Instagram y le agradezco. Vienen de 45 días de concentración, lo que más quieren es descansar y estar con su gente. Yo quería que vieran la alegría del pueblo y se reconfortaran con el cariño y el reconocimiento del pueblo, y estoy conforme con eso. Es una alegría. Ya habrá tiempo para hablar con ellos, hay que dejar de pensar en nosotros, y pensar en ellos, la Selección no es mía, ni de la oposición, es de todos. Como cuando se habla del Papa, no es de nadie, es todos”, terminaría por explicar el presidente.