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El incómodo momento entre Karina Jelinek y Gabriel Schultz en televisión

La modelo fue anfitriona en "Divina Comida" y tuvo un tenso cruce con el periodista, que le apuntó al matrimonio de la morocha con Leo Fariña.

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El incómodo momento entre Karina Jelinek y Gabriel Schultz en televisión

De a poco, Karina Jelinek va reapareciendo en televisión. Esta vez, la modelo que se tomó un tiempo alejada de las cámaras para viajar, estuvo como anfitriona de "Divina Comida", el programa de Telefe (lunes 23.15) en el que distintas celebridades reciben a otros famosos en su casa para competir a ver quién es la o el mejor anfitrión.

La morocha abrió las puertas de su despampanante hogar a Silvina Luna, Gabriel Schultz, Ferando Carlos y Mariano Pelufo. Y todo comenzó mal cuando el periodista hincha de Argentinos Juniors llegó tarde a la casa de Karina en nordelta. "Perdón la hora, pero salí ayer de casa para poder llegar", tiró Schultz y a la modelo no la convenció mucho esta respuesta.

Durante la noche, los palitos de un lado y otro continuaron. De hecho, Gabriel se quejó porque el menú que eligió Karina era vegetariano. "Me hubieras avisado antes y venía comido. ¿Qué voy a comer, lechuga?, disparó el periodista y la cara de la morocha lo dijo todo.

Como si esto fuera poco, quien supo conducir TVR le reprochó a la anfitriona: "Siento que Karina está a la defensiva conmigo, todo lo que digo le molesta, me lo discute. La verdad es que no entiendo, será que no le caigo bien". Karina no respondió y la cena continuó aunque hubo otro cruce antes de que el clima se volviera definitivamente tenso. Ella habló de lo bueno que le resulta, una vez a la semana, consumir solamente líquidos y Gabriel la cruzó: "Eso no es vida, no tiene sentido. Nuestros antepasados no conocían la expresión 'D Tox' y vivían mucho mejor". Visiblemente molesta, la modelo respondió: "¿Por qué no tiene sentido para vos? Me parece que no sabés lo que estás diciendo".

Sobre el final, la dueña de casa habló sobre su matrimonio con Leonardo Fariña y Schultz no se guardó nada. "Esta vez tené más cuidado", le advirtió y ella, cansada, contestó: "Ya lo sé, no hace falta que me lo digas. Con cada situación que te va pasando en tu vida vas aprendiendo. Ahora estoy más feliz y más madura. No me arrepiento ni me victimizo. Son etapas de la vida. Si me tengo que volver a casar, lo haría feliz y contenta, pero ya con otra madurez". Cuando terminó la cena, la anfitriona calificó a los comensales. ¿Qué puntaje le puso?