NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

BOCA 0-2 RIVER

¡River es el Supercampeón!

Los Millonarios superaron por 2 a 0 a los Xeneizes y se coronaron campeones con goles de Pity Martinez de penal y Nacho Scocco. Franco Armani fue la figura de la final.
Islandia – Croacia en vivo: Mundial 2018, grupo D en directo

Actualizado a
¡River es el Supercampeón!
AStv

River derrotó 2 a 0 a Boca y se coronó campeón de la Supercopa Argentina. No jugó bien el equipo de Marcelo Gallardo pero tuvo la virtud de golpear en los momentos justos, en la segunda parte, cuando Boca jugó mejor y pareció más cerca de lograr el empate. Los Millonarios ganaron un partido que por lo mostrado en la primera parte parecía impensado. Con una gran respuesta del arquero Armani, la figura del encuentro, quien tuvo dos intervenciones decisivas para mantener su arco en cero.

Y con un Nacho Fernandez jugando como volante por derecha haciendo un gran despliegue y participando en los dos goles. En el primero porque Cardona le cometió la falta en al área que Lousteau sancionó como penal, y que Pity Martinez transformó en gol. Y en el segundo, porque la jugada nacida con un contraataque iniciado por él, terminó en los pies de Nacho quien en la primer pelota que tocó marcó el segundo gol.

Fue un partido más friccionado y conversado que jugado en la primera parte. Hubo que esperar hasta el final del segundo tiempo para que el partido fuera emotivo. Poco juego y mucha fricción de los dos equipos, pero Boca sacaba ventaja con el tridente Cardona-Pablo Pérez y Christian Pavón, y se las ingeniaba para generar más peligro. Le faltó profundidad y sintió la ausencia de Carlos Tévez quien si bien jugó todo el partido, tuvo una pobre participación.

River buscó controlar la pelota y los espacios con un gran despliegue de sus volantes, y sacar ventaja en las pelotas divididas para salir de contra. Y fue Nacho Fernández el jugador que inició las mejores contras de su equipo. Boca, el puntero de la Superliga que acaricia el título, que por actualidad llegaba mejor a esta final, sintió la complejidad de controlar la posesión, con un Tévez que estuvo ausente toda la primera parte. Pavón y Pablo Pérez fueron los únicos que trataron de armar juego y sacar ventaja en velocidad, y llegar con peligro al área de River, aunque sin efectividad en el arco.

El partido careció de situaciones y emociones. Solo la falta absurda de Cardona pegando una patada de atrás a Nacho Fernandez, le permitió a River abrir el marcador con un gol de penal de Pity Martinez. Fue el 10 Millonario quien armó la jugada que terminó en el gol. Y Boca debió esperar hasta el segundo tiempo para rearmar su estrategia para dar vuelta el marcador.

En la segunda parte, Boca salió del vestuario dispuesto buscar el gol del empate y presionar a River. Y tuvo la primera chance para marcar la igualdad, después de un tiro libre de Cardona que Magallán cabeceó pero Armani, con una gran atajada despejó la pelota por encima del travesaño.

Camilo Mayada ingresó por Montiel, quien debió abandonar el campo de juego con una molestia muscular. Y Enzo Pérez sintió el desgaste realizado en la primera parte, y dejó su lugar a Zuculini para compartir el mediocampo con Ponzio. El ex del Valencia continúa en un nivel muy por debajo de lo demostrado en su primer semestre en River. También se fue reemplazado Pratto por Nacho Scocco. El delantero no tuvo chances de rematar al arco. Pero River no supo aprovechar las malas salidas del fondo de Boca y se dedicó más a regular energías.

Los xeneizes merecían por juego, el empate. Ganaron mayor presencia en área rival, y llegaron con mayor peligro con las muy buenas combinaciones de Nández, Pablo Pérez, Cardona. Tuvo una buena chance Christian Pavón, quien se escapó en un slalon por la derecha, pero el arquero Armani arriesgó y salió del área y le evitó sacar el remate. Era todo de Boca, pero bajo los tres palos estaba Armani. Y en la jugada siguiente, el arquero, la figura de los de Gallardo, evitó el gol a Jara después de una buena combinación con el uruguayo.

Lo que nadie esperaba en el mejor momento de Boca fue la respuesta de contraataque de River. Y en un descuido de los xeneizes, Nacho Fernandez le ganó la posición con el cuerpo a Cardona, y tocó rápido para Pity Martinez, y le puso la pelota a los pies de Nacho Scocco quien marcó el segundo gol. Fue el golpe de knock out para Boca. Nunca se recuperó. Y se apagó desconcertado. Sin reacción. Y River gritó campeón de la Supercopa para recuperar la sonrisa y recomponer el fútbol extraviado en su temporada más critica de la era Gallardo como entrenador. Sus jugadores volvieron a mostrar la mística y su capacidad anímica para afrontar las grandes finales.