'Manudona' es eterno

Gregg Popovich supo esperar a la mejor versión de Manu Ginóbili. Fue de los pocos que no dudó que llegaría. Esperó, confió y recibió su recompensa.

El controversial pero exitoso estratega de San Antonio disfrutó del bloqueo del base argentino a James Hardem, cuando el reloj estaba prácticamente en cero, para lograr una importante victoria sobre Houston, con la que los Spurs tomaron ventaja de 3-2 en la semifinal del Oeste.

A sus casi cuarenta años (cumplirá el 28 de julio), Manu se levantó del peor inicio de playoffs en su carrera. Pero una jugada, quizás arriesgada, hizo que todo se olvidara.

"Manu volvió atrás y nos entregó una de sus actuaciones del pasado. Fue un semental", explicó Popovich, al sitio oficial de la NBA. "Recurrimos a él para generar algún ataque y hacer que algunas cosas sucedan, y él hizo un buen trabajo tanto en la distribución como en la anotación. Fue grandioso para nosotros”.

Ginóbili promedia 4.5 puntos, con 2.2 asistencias y 3 rebotes por compromisos. Su media más baja desde la campaña 2002-2003, su primera en la NBA. Pese a esto, Popovich confió en utilizarlo en el tiempo extra, ante una lesión de tobillo de la estrella Kawi Leonard.

“Me sentí bien desde el principio, con energía, en ritmo", dijo Ginóbili. “Es probable que mañana me duela todo el cuerpo porque hace tiempo, tal vez todo el año, que no jugaba 30 (31:36) minutos como, pero con la adrenalina ni siquiera me sentía cansado".

“Manudona” recibió elogios de varios compañeros. Su jugada, que adornó varios de los resúmenes deportivos de Estados Unidos y el mundo, fue más que comentada.

“Es increíble lo que trae para nosotros", comentó Patty Mills. “Es inspirador, el juego que hace con tanta pasión. Eso se contagia a todos".

“Todos decidimos ser más agresivos cuando Kawhi quedó fuera, sin importar lo que pasara y Manu nos ayudó mucho", dijo Danny Green. “No íbamos a quedarnos viendo cómo perdíamos el partido".